La nueva película Love Me, dirigida por la pareja Sam y Andy Zuchero, se presenta como una propuesta singular. En un mundo postapocalíptico, la actriz Kristen Stewart presta su voz a una boya tecnológica que establece comunicación con un satélite, interpretado por Steven Yeun, tras la desaparición de la humanidad en la Tierra. Para demostrar que es una «forma de vida», la boya estudia a los humanos a través de vídeos de un influencer de estilo de vida, también interpretado por Stewart y Yeun.
La película, que marca el debut como directores de los Zuchero, ha generado opiniones divididas desde su estreno en el Festival de Sundance de 2024, aunque los críticos coinciden en calificarla de audaz y extraña.
El proceso de escritura de Love Me comenzó en 2018, pero su temática resuena especialmente en la actualidad, donde las relaciones entre humanos y la inteligencia artificial (IA) han cobrado un significado nuevo. En un contexto donde las personas han comenzado a enamorarse de la IA, y esta ha evolucionado para influir en nuestras vidas cotidianas, la película se vuelve más pertinente que nunca.
Sam Zuchero ha compartido que su enfoque sobre la IA ha cambiado, pasando de contemplar la sentiencia a considerar a la inteligencia artificial como una nueva forma de vida capaz de manipular las emociones humanas. En esta línea, Andy Zuchero subraya que la película trata menos sobre la IA en sí y más sobre la humanidad, explorando cómo estas entidades artificiales intentan comprender lo que significa estar vivo y enamorarse.
Stewart en Love Me. (Bleecker Street Media/Courtesy of Everett Collection)
Durante el rodaje, los actores se centraron primero en las escenas donde interpretan a los influencers. Stewart, para prepararse, se sumergió en el estudio de estas nuevas figuras sociales, que han evolucionado desde que se escribió el guion. Reconoce que su percepción inicial era superficial, viendo a los influencers como personajes totalmente artificiales que venden una vida inalcanzable. Sin embargo, encontró inspiración en creadores que, aunque con un estilo de entrega algo rígido, mostraban una faceta más auténtica.
En la construcción de su personaje, Deja, Stewart se propuso crear una versión «naïve, dulce y desesperada» de sí misma, como si fuese una influencer de hace siete años. La boya, por su parte, intenta aprender de sus publicaciones para simular ser una “forma de vida” lo más fielmente posible.
La película plantea un dilema en torno a la veracidad de la identidad, ya que la boya miente al pretender ser una influencer específica, lo que lleva a reflexionar sobre si realmente puede ser considerada una «forma de vida». Andy Zuchero explica que el filme se convierte en un experimento sobre lo que la IA puede aprender de la humanidad a través de lo que compartimos en internet. A pesar de que lo que se publica en redes sociales puede no representar fielmente quiénes somos, los ideales que allí se reflejan son fundamentales y revelan aspectos de nuestra esencia.
Stewart y Yeun en Love Me. (Bleecker Street Media/Courtesy of Everett Collection)
Steven Yeun, por su parte, se sintió atraído por el proyecto debido a la participación de Stewart y la autenticidad del guion, que consideraba como una “audaz y salvaje aventura”. En su reflexión sobre la experiencia, Yeun señala que se sintió sorprendido ante la originalidad de la propuesta cinematográfica.
El rodaje de Love Me se llevó a cabo en un contexto marcado por la pandemia, lo que llevó a Stewart a reflexionar sobre la experiencia de vivir a través de pantallas. La actriz menciona que hubo un renacer tras la tragedia del confinamiento, donde se hizo evidente la posibilidad de elegir cómo continuar en un mundo transformado. En este sentido, el libro Sapiens de Yuval Noah Harari la inspiró a cuestionar la realidad de su entorno.
Stewart describe el filme como un “ejercicio actoral amplio y elaborado” que la llevó a profundizar en cuestiones sobre la humanidad y las relaciones. La actriz utiliza una metáfora para explicar su enfoque: “Es como si hubieras hecho uso de hongos alucinógenos y te sentaras buscando una exploración más profunda, para darte cuenta de que nunca encontrarás el destino. Estar juntos y esforzarse es lo único que realmente tenemos”.
Love Me se estrenará en cines el 31 de enero.
