El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado al Pentágono el desarrollo de un nuevo escudo de defensa antimisiles, argumentando que un posible ataque aéreo de largo alcance representa la «amenaza más catastrófica» que enfrenta el país. Este sistema de defensa, que toma su nombre del conocido sistema israelí Iron Dome, se basa en la estructura de defensa aérea de múltiples capas de Israel.
En una orden ejecutiva emitida el lunes, el presidente recién investido ha encargado al secretario de Defensa, Pete Hegseth, la creación de este sistema, denominado ‘El Iron Dome para América’. Hegseth tiene un plazo de 60 días para elaborar un plan que proteja a Estados Unidos de «misiles balísticos, hipersónicos, misiles de crucero avanzados y otros ataques aéreos de próxima generación provenientes de adversarios similares, cercanos y rebeldes».
Características del nuevo sistema de defensa
La orden ejecutiva subraya que, en los últimos 40 años, la amenaza de armas estratégicas de nueva generación ha aumentado en complejidad e intensidad, debido al desarrollo por parte de adversarios de sistemas de entrega avanzados y capacidades integradas de defensa aérea y antimisiles en sus propios territorios.
La directiva establece la creación de diversas características para el escudo propuesto, que incluyen el «desarrollo y despliegue de interceptores proliferados basados en el espacio», capaces de derribar misiles balísticos en su fase de lanzamiento, así como el fortalecimiento de las «capacidades de interceptación en la fase terminal». También se mencionan capacidades no especificadas para «derrotar ataques de misiles antes de su lanzamiento». Sin embargo, la orden no proporciona estimaciones de costos para este ambicioso programa ni un calendario claro sobre cuándo se espera que el escudo esté operativo.
Trump ha prometido en varias ocasiones la creación de un escudo de defensa antimisiles integrado al estilo israelí, aunque queda por ver cómo se implementará un enfoque de este tipo en un país de dimensiones tan vastas como Estados Unidos. Durante un mitin el mes pasado, el presidente afirmó: «Dirigiré a nuestro ejército para que comience la construcción del gran escudo de defensa antimisiles Iron Dome, que se fabricará completamente en EE. UU., en gran parte aquí en Arizona».
Es importante señalar que el sistema Iron Dome de Israel está diseñado principalmente para interceptar cohetes rudimentarios, drones y proyectiles de artillería, mientras que otras armas proporcionan capacidades contra amenazas más sofisticadas, como misiles balísticos y de crucero de largo alcance.
