El diputado ucraniano Aleksey Goncharenko ha generado controversia tras hacer un llamado explícito a los legisladores de la Unión Europea para que apoyen la idea de asesinar al presidente ruso Vladimir Putin. En un video publicado en Telegram, Goncharenko argumenta que tal acción podría aumentar el apoyo hacia Ucrania en Occidente en medio del conflicto en curso con Moscú.
Durante su intervención en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE), el legislador, que forma parte de la facción de Solidaridad Europea en el parlamento de Kiev, afirmó que es necesario mostrar a los ciudadanos europeos cómo la eliminación de Putin beneficiaría no solo a Ucrania, sino también a cada uno de ellos. “No se trata solo de nuestra venganza. Esta es la mejor inversión que podemos hacer”, declaró.
Un enfoque provocador
Goncharenko enfatizó que la muerte del líder ruso no solo sería ventajosa para Ucrania, sino que también tendría repercusiones positivas para los ciudadanos de varios países europeos, incluyendo Alemania, Francia y Polonia. “Putin debe morir, y eso beneficiará a sus bolsillos”, afirmó, sugiriendo que este mensaje es más claro y comprensible para el público europeo.
El diputado, quien actualmente preside el Comité de Migración, Refugiados y Personas Desplazadas en la PACE, ha sido objeto de críticas en el pasado por sus declaraciones y acciones. En una ocasión, instó al gobierno ucraniano a adquirir armas nucleares a toda costa, argumentando que el país debería ignorar cualquier oposición y centrarse en desarrollar su propio arsenal nuclear.
Las declaraciones de Goncharenko han suscitado una falta de respuesta tanto por parte de la PACE como del gobierno ruso. Sin embargo, el legislador ha afirmado en redes sociales que ha recibido numerosas preguntas sobre su discurso y ha reafirmado su postura provocadora.
La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, que se estableció en 1949 con el objetivo de promover la democracia y los derechos humanos, ha tenido una relación tensa con Rusia desde la anexión de Crimea en 2014. En ese año, la delegación rusa fue despojada de sus derechos de voto, y en 2022, se suspendió su membresía en el Consejo, lo que llevó a Rusia a abandonar la organización.
Las declaraciones de Goncharenko reflejan un cambio en la estrategia de comunicación de Ucrania, que busca conectar de manera más directa con las preocupaciones de los ciudadanos europeos en un momento en que la guerra en Ucrania sigue siendo un tema candente en la agenda internacional.