El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha confirmado la suspensión de los aranceles del 25% sobre las importaciones canadienses por parte de Estados Unidos durante al menos 30 días. Esta decisión se produce tras un pacto similar alcanzado entre México y Estados Unidos el mismo día.
La medida fue anunciada después de una conversación telefónica entre Trudeau y el presidente estadounidense, Donald Trump, en la que Canadá se comprometió a reforzar la seguridad en la frontera. Esta suspensión sigue a la decisión de Trump de imponer aranceles—25% sobre las importaciones de México y Canadá y 10% sobre las de China—justificándola por preocupaciones relacionadas con la inmigración ilegal y el tráfico de drogas.
Compromisos de Canadá en la lucha contra el tráfico de drogas
Trudeau declaró en una publicación en X que “los aranceles propuestos se pausarán durante al menos 30 días mientras trabajamos juntos”. Además, el primer ministro canadiense anunció la implementación de un plan de 1.300 millones de dólares para reforzar la frontera, que incluye la incorporación de nuevos helicópteros, tecnología y personal, así como una mayor coordinación con los socios estadounidenses y recursos adicionales para frenar el flujo de fentanilo.
Como parte del acuerdo, se desplegarán cerca de 10.000 agentes en la frontera. Canadá también ha presentado nuevas iniciativas, como el nombramiento de un “Czar del Fentanilo”, un funcionario gubernamental encargado de coordinar los esfuerzos para combatir la crisis de opioides y prevenir el tráfico de fentanilo. Trudeau añadió: “Listaremos a los carteles como terroristas, aseguraremos una vigilancia constante en la frontera y lanzaremos una Fuerza de Tarea Conjunta Canadá-EE.UU. para combatir el crimen organizado, el fentanilo y el lavado de dinero”. También firmó una nueva directiva de inteligencia sobre crimen organizado y fentanilo, respaldada con 200 millones de dólares.
Donald Trump expresó su satisfacción con el acuerdo inicial alcanzado con Canadá en una publicación en Truth Social, afirmando que “estoy muy complacido con este resultado inicial, y los aranceles anunciados el sábado se pausarán durante un periodo de 30 días para ver si se puede estructurar un acuerdo económico final con Canadá. ¡JUSTICIA PARA TODOS!”
Más temprano, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, alcanzó un acuerdo similar con Trump, comprometiéndose a desplegar 10.000 tropas de la Guardia Nacional en la frontera entre Estados Unidos y México para abordar el tráfico de fentanilo y la inmigración ilegal. A cambio, Estados Unidos se comprometió a intensificar sus esfuerzos para detener el tráfico de armas hacia México.
Los mercados experimentaron una volatilidad aumentada, con índices bursátiles y valoraciones de criptomonedas fluctuando, en respuesta a lo que se ha descrito como un “capricho arancelario de Trump”, aunque posteriormente se recuperaron parcialmente tras el anuncio del acuerdo con México.
Trump ha enfatizado de manera constante los aranceles como una herramienta clave de negociación en las discusiones comerciales, tanto durante su primer mandato como tras su reelección en 2024. Hasta el momento, no ha ofrecido un retraso de 30 días para los nuevos aranceles del 10% sobre las importaciones chinas, aunque indicó que anticipa conversaciones con China “probablemente en las próximas 24 horas”.
El domingo, Trump sugirió que la Unión Europea podría ser el próximo objetivo de los aranceles estadounidenses, sin especificar un calendario. En respuesta, líderes europeos, incluidos el presidente francés Emmanuel Macron y el canciller alemán Olaf Scholz, han enfatizado su disposición a defender los intereses de Europa y considerar medidas recíprocas si es necesario.