Elegir un buen refrigerador para el hogar no es una tarea fácil si tenemos en cuenta el gran número de modelos disponibles. Sin embargo, hay dos aspectos claves y que pueden ser determinantes para una compra con criterio: nuestras necesidades y el precio. En los últimos años, han surgido infinidad de neveras más avanzadas y con una tecnología más sofisticada, no obstante, una de las mejores decisiones se relaciona con la eficiencia energética y la capacidad del electrodoméstico.
El frigorífico se ha convertido en nuestro mejor aliado, probablemente, no nos demos cuenta de su importancia hasta que sufre una avería. Por eso, existen múltiples dudas a la hora de comprar un modelo nuevo, como la tecnología no frost, la modernidad, la marca, elegir una o dos puertas, etc.
En función de las características de cada uno de ellos, sus funcionalidades también varían. Por dicha razón, vamos a conocer los diferentes tipos de refrigeradores para elegir el que más nos conviene.
Los diferentes tipos de refrigeradores
Realmente, no existe el refrigerador perfecto, pero sí aquel que cubre nuestras necesidades en un momento puntual. Probablemente, una nevera es ideal en un momento determinado de nuestra vida hasta que hay que apostar por otra opción, si nuestros requerimientos cambian. Por ello, los fabricantes nos ofrecen diferentes tipos de neveras y es conveniente reconocerlas.
- Coolers. Estos frigoríficos no incorporan congelador, aunque ofrecen una tecnología que garantiza una vida más cómoda. Para aquellas personas que disponen de un arcón, esta propuesta es muy acertada.
- Refrigerador convencional. En este caso, se trata de la nevera de siempre, con una puerta pequeña para el congelador y una o dos puertas para la zona común.
- Frigorífico combi. Aquí prevalece la ergonomía, por lo que esta opción es ideal para evitar agacharse, puesto que incorpora el congelador en la parte superior.
- Frigorífico americano. Este modelo es para espacios grandes, porque incluye dos puertas verticales y un dispensador automático para el agua fría.
- No frost. Esta tecnología ha alcanzado bastante protagonismo en los últimos años y se caracteriza por evitar la acumulación de escarcha o hielo en el interior.
- Frigoríficos ecológicos. Por último, tenemos este modelo en el que no se emplean gases contaminantes (clorofluorocarbonados o hidrofluorocarbonos), que dañan la capa de ozono.
Cómo elegir un buen refrigerador para el hogar
Las marcas punteras en el mercado son sinónimo de confianza y toda una garantía, sin embargo, un buen frigorífico debe cumplir una serie de requisitos para mantener los alimentos a la temperatura adecuada. En este listado, se ofrecen algunas de las principales características para hacer un buen análisis.
- Dimensiones. En primer lugar, hay que medir el espacio disponible para que el frigorífico encaje perfectamente.
- Capacidad. Para conocer la capacidad del electrodoméstico, hay que hacer una medición en litros útiles.
- Consumo. El consumo del frigorífico dependerá de su uso y la cantidad de veces que se abre a lo largo del día.
- Funciones extra. Hay una serie de funcionalidades que son adecuadas si se quiere conseguir una refrigeración o congelación más rápida.
- Cajones especiales y dispensadores. Igualmente, los compartimentos son otro aspecto fundamental a la hora de decidirnos por un modelo u otro. Por ejemplo, hay ciertos departamentos que mantienen la humedad de las verduras y las frutas.
- Etiquetas. Por último, es importante revisar las etiquetas del electrodoméstico para asegurarnos de que ofrece la mejor eficiencia energética.
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