El que fuera impulsor de Podemos, creador del diario Público (a cuya plantilla despidió en 2012 en su casi totalidad) y del grupo de comunicación Mediapro, Jaume Roures, está detrás de la convocatoria pseudo pacifista que ha llamado a concentrarse por todo el país para el próximo 12 de diciembre. O al menos así lo afirman diversos medios alternativos como LaHaine o ElMunicipio.es.
Según estos medios, el motivo por el que el magnate trotskista auspicia esta convocatoria, es que «Roures tiene grandes inversiones en Qatar, país que apoya el terrorismo internacional contra Siria».
Recordemos que esta convocatoria «contra la guerra», lo que pide es un alto el fuego en Siria, que es lo mismo que los terroristas del Estado Islámico han solicitado, tras el avance del Ejército Árabe Sirio y la aviación rusa en Alepo. La excusa para esta solicitud es poder evacuar a los civiles, sin embargo, no ha sido hasta que las fuerzas armadas sirias han entrado en Alepo, cuando los civiles han podido ser rescatados. Centenares de civiles han celebrado su liberación, como se ha podido ver en centenares de medios de comunicación no pro-occidentales.
Tal y como afirmó recientemente el abogado Robert Kennedy júnior, sobrino del expresidente norteamericano John F. Kennedy; Qatar ofreció en 2010 construir un gasoducto por valor de 10.000 millones de dólares a EEUU, que atravesaría Arabia Saudí, Jordania, Turquía y Siria. El gobierno de este último se negó, por lo que tanto EEUU como Qatar necesitan un cambio en el ejecutivo sirio para poder desarrollar su mega proyecto, y entrar de lleno en su guerra por el control del gas con Rusia.
Según el diario Expansión, Roures y su empresa, Mediapro, poseen una oficina y 90 empleados en Doha, capital de Qatar. Allí, esta empresa de capital catalán se dedica a la producción de retransmisiones deportivas. Además es la patrocinadora de la liga de fútbol del vecino Dubai.
Recordemos que la Qatar Foundation, a su vez, es la patrocinadora de la camiseta del Barça a cambio de 165 millones de euros.
«Roures posee 250 millones en 150 cuentas, un tercio en paraísos fiscales. El fundador de Mediapro, que solicitó concurso en el año 2010, controla los derechos televisivos de la mayoría de los clubes de fútbol».
