No hay duda de que casi todas las personas del mundo disponen de un teléfono móvil. Estos dispositivos no sólo son usados para realizar llamadas telefónicas como se hacía cuando aparecieron en el mercado a finales de los años 80. Ahora los teléfonos han sustituido prácticamente a los ordenadores, debido a las múltiples herramientas con las que cuentan: aplicaciones ofimáticas, planificadores, agendas, despertadores, traductores, etc.
Tener un teléfono móvil equivale a llevar la oficina en el bolsillo. Definitivamente, la creación de estos dispositivos ha tenido una evolución acelerada que ha implicado una innovación exponencial en la industria de software y hardware, con el objeto de satisfacer las necesidades de los usuarios en cuanto a la realización de llamadas telefónicas, videoconferencias, transmisión de datos y todos aquellos procesos que les permitan tener una comunicación fluida e inmediata con sus compañeros de trabajo, familiares y amigos.
Es impresionante echar la vista atrás y observar cómo estos dispositivos han pasado de ser simples teléfonos con un teclado numérico, un botón verde y un botón rojo, a convertirse en mini ordenadores inteligentes que son capaces de recomendarte restaurante, pareja o los ejercicios que te convienen para perder peso sin perder masa muscular.
Todo esto no se hubiese logrado sin la aparición de las apps y sin su capacidad de instalarse y desinstalarse a placer. Las empresas y comunidades independientes de desarrollo de software han puesto a la disposición de los usuarios un sin fin de apps para móviles que hacen por nosotros parte de nuestras tareas diarias y que sacan el máximo partido al teléfono. Un ejemplo simple de ello son las apps para linternas que te permiten ver en la oscuridad usando el flash de la cámara de fotos del teléfono. Llevar una linterna siempre encima mejora enormemente nuestra vida y nos aporta nuevas habilidades haciéndonos mejores.
Algo tan simple como poder encender el flash del teléfono móvil ha facilitado mucho el trabajo a mecánicos, fontaneros y a otros profesionales que deben acceder continuamente a espacios reducidos y oscuros. Pero es que más muchas otras personas también usan apps como estas para entrar a su habitación sin encender la luz para no despertar a su pareja, para encender la luz de la escalera cuando el temporizador se acaba, para ver debajo de un mueble o tras un fallo eléctrico de la compañía suministradora. Poder disponer de manera rápida y fácil de una linterna en momentos inesperados era algo ahora insustituible e impensable hace pocos años.
¿Cómo funciona la linterna en los móviles?
Una vez instalada la app de linterna en el dispositivo, simplemente debes iniciar la aplicación y pulsar el botón de encendido para que se active el flash con una fuente de luz lo suficientemente potente cómo para iluminar cualquier espacio oscuro. De hecho, algunos móviles cuentan con una luz tan fuerte que puede iluminar completamente una habitación, todo depende de las prestaciones del teléfono y de la app que hayas instalado.
En realidad existen 2 tipos de apps de linterna: las más efectivas hacen que el flash del dispositivo móvil se pueda encender a través de un botón, y las otras visualizan una página blanca retroiluminada en la pantalla del móvil con la que se puede llegar a ver a unos pasos de distancia. Manejar cualquiera de ellas es un proceso muy sencillo todas son apps gratuitas.
Cientos de opciones disponibles
Estas apps han sido diseñadas considerando casi todos los sistemas operativos existentes, aunque centrándose principalmente en Android, iOS y Windows. Para descargarlas solo tienes que ir a la tienda oficial de tu dispositivo, pero, antes de perder entre cientos de opciones disponibles, es mejor consultar webs especializadas sobre el tema que te aconsejen cómo conseguir la mejor linterna para móvil gratis.
Es fácil tener una linterna gratuita en tu móvil, lo difícil es encontrar una que alumbre lo suficiente sin descargar la batería del teléfono en un abrir y cerrar de ojos. ¿Flash LED, doble LED, Xenon o híbrido? Todo un mundo.
No hay duda de que funciones como esta son muy valiosas para los usuarios de teléfonos inteligentes. El flash ya era muy útil permitiéndonos sacar fotos y vídeos con poca luz, pero ahora nos permite transformar el teléfono en una poderosa linterna. Es tan simple y tan productivo que cuesta creer que no lo hayamos inventado antes.
