Según detalla hoy El Confidencial, la documentación incautada por la Guardia Civil el pasado 20 de octubre en el despacho del secretario de Hacienda catalán, Lluís Salvadó, hombre de confianza de Oriol Junqueras, los independentistas de la Generalitat escondían, nunca mejor dicho, un arma nuclear bajo el brazo.
Cataluña cuenta con tres de las siete centrales nucleares que operan en nuestro país, siendo la comunidad autónoma que más energía produce. De la documentación incautada se desprende que Puigdemont y su equipo pretendían tomar el control de las infraestructuras críticas desplegadas en territorio catalán tras el referéndum ilegal del 1 de octubre.
Según su argumentación, «la falta de colaboración/cooperación entre ambos actores podría generar una serie de problemas con potencial contagio del resto del sistema económico y financiero europeo e internacional».
Cataluña cuenta con tres centrales nucleares, Ascó I , Ascó II y Vandellós II, todas en Tarragona. Entre las tres suman casi la mitad de la potencia nuclear de la que dispone España.