Con el fin de dar un giro a la situación, sería fundada Universal Robots en 2005, que pronto se situaría a la vanguardia de la robótica industrial, gracias a la puesta en el mercado de cobots que gracias a su capacidad para trabajar directamente al lado de los operarios de producción sin protección adicional de seguridad, permitían integrar estos equipos en las líneas de producción manuales.
Precisamente esta gran brecha de la automatización se hacía relevante en las pequeñas y medianas empresas, que no podían acceder a este tipo de equipos por su complejidad de utilización y costes asociados. A diferencia de otro tipo de robots que trabajan dentro de jaulas de seguridad en las grandes líneas de montaje, los equipos de Universal Robots son ligeros, de alta flexibilidad y son sencillos de reubicar o reprogramar, resolviendo los desafíos de cortas series de producción y lotes pequeños y además de ello, sus costes de amortización los ponen al alcance de prácticamente cualquier empresa. Como se puede comprobar analizando el caso de la compañía India Autolab un robot colaborativo de UR puede enfrentarse a prácticamente cualquier tarea y requerimiento.
Un cobot para cada necesidad.
El primero de los productos diseñados, fabricados y comercializados por Universal Robots, sería el UR5, un brazo robótico con 6 puntos de articulación llamado a revolucionar el mundo de los robots industriales. Con un peso de 18 kg y una capacidad de trabajo de hasta 5 kg de peso, su radio de acción es de 850mm, todo un ejemplo de flexibilidad y utilidad en un robot colaborativo.
Poco tiempo después, en 2012 Universal Robot, lanzaría su hermano mayor, el denominado UR10, que cuenta con una capacidad de carga de hasta 10Kg y un alcance de 130mm. Diseñado de conformidad con los mismos principios que el UR5, es igualmente flexible y fácil de implementar en los procesos productivos de cualquier empresa.
2014 sería otro año de cambios en la robótica industrial. La nueva generación de los UR5 y UR10, permitió adaptar los ajustes de seguridad a cada aplicación específica y a sus propios procedimientos. Con 8 funciones de seguridad ajustables, 32 entradas y salidas integradas y un flujo mejorado de trabajo, permiten conectar los equipos a cajas de control. Su sistema de seguridad, denominado «UR Safety 3.0» está además certificado por TÜV.
El compacto de la compañía llegaría en el año 2015 en la forma de UR3, un robot colaborativo de sobremesa, con un peso muy ligero: tan sólo 11 kg. Sin embargo cuenta con una alta capacidad de carga en relación a su peso de 3 kg, rotación de 360 grados en todas sus articulaciones de muñeca y una rotación infinita en la articulación terminal. Todo ello hace que el UR3 esté considerado como el cobot de tipo sobremesa con menor peso y mayor flexibilidad del mercado actual. Sin duda, una elección muy adecuada para aquellas aplicaciones que requieren las capacidades de un robot de 6 ejes, con un tamaño y costes realmente reducidos.
Prácticos e intuitivos.
Una de las características fundamentales de los equipos de Universal Robots es su fácil utilización sin requerir una experiencia previa en el mundo de la la robótica para su manejo que tampoco requiere un control permanente por parte del personal. Además, están capacitados para trabajar en entornos de escasa iluminación.
Según la experiencia de miles de usuarios en todo el mundo, un operador sin formación específica, está capacitado para desembalar cualquiera de los robots de la gama y lograr que se encuentre operativo en tan solo una hora, incluyendo su programación básica para sus primeras tareas. Sin duda toda una muestra de sencillez y eficacia que ahora se encuentra al alcance de cualquier empresa.