El verano es esa maravillosa estación que tarda en llegar nueve largos meses y que permite disfrutar de los grandes eventos de la temporada al aire libre, como festivales, ferias y fiestas patronales de ciudades y pueblos cuya celebración cambiaría por completo de tener que celebrarse en otra estación. “Todo el que tiene pueblo sabe que las fiestas patronales son un acontecimiento de importancia superlativa, un evento ineludible para toda la familia, algo que se programa a conciencia y en donde nada puede fallar” indican desde Carisma Espectáculos.
Para hacerse una idea de la cantidad de fiestas patronales que se celebran en España durante la época estival basta pensar en que el territorio español está dividido en 50 provincias y que éstas, a su vez, se dividen en 8125 municipios que, por supuesto, estarán deseosos de honrar a su patrón con la mejor de las fiestas posibles.
Resulta complicado ponerse en la piel de una de las personas que dedican gran parte de su tiempo libre a conseguir que las fiestas de su municipio sean las mejores de los alrededores, pero lograrlo no resulta tan sencillo.
¿Cuáles son las claves del éxito?
- Se debe tener muy en cuenta que son fiestas para todos los públicos. A ellas acude toda la familia, desde los nietos a los abuelos o bisabuelos si hay suerte. Por este motivo es necesario pensar en los distintos grupos de edades y lo qué puede hacer que se diviertan juntos o por separado, programando actividades para todas las edades que pueden ir desde el típico partido de fútbol de solteros contra casados hasta carreras de sacos o concursos en los que se elijan a las personas que mejor preparan los platos típicos de la región.
- Las atracciones como los coches de choque y los hinchables garantizan la diversión entre los más pequeños mientras que los adultos agudizan la puntería en puestos como el de dardos para conseguir un peluche para los pequeños. Además de las anteriores, en toda buena fiesta que se precie resulta también imprescindible un puesto donde adquirir algodón de azúcar o garrapiñadas.
- El bar que se monta en la plaza del pueblo resulta de lo más necesario cuando el sol aprieta durante la sesión vermú y también durante la noche cuando jóvenes y no tan jóvenes se toman algo al ritmo de la música.
- Pero “sin duda, si existe un elemento imprescindible y clave en toda fiesta de pueblo, es contar con una buena orquesta que amenice tanto la sesión vermú como la larga jornada nocturna. La orquesta deberá contar con un amplio repertorio que incluya los clásicos pasodobles para los más mayores hasta canciones de moda de los últimos meses” subrayan desde Carisma Espectáculos.