Todo llega, y pese a que muchos siempre nos sentiremos jóvenes, la edad y los años no pasan en balde. Ello no quiere decir que renunciemos a sentirnos como tales, incluso a padecer cierto grado del conocido como “síndrome de Peter Pan”, pero hemos de tomar conciencia y preparar el futuro, nadie lo hará por nosotros y, cuando llegue, mejor será estar bien cubiertos.
Así, nunca es demasiado pronto para empezar a engrosar la cuenta de ahorros, el colchón financiero al que habremos de acudir una vez alcancemos la edad de abandonar esa franja demográfica conocida como “población activa”, esto es, cuando nos jubilemos.
Esa posible fuente de financiación futura, puede proceder de los beneficios obtenidos con anterioridad a dicha edad, a través de diversas inversiones. Entre tales inversiones en la actualidad, por el escaso capital inicial requerido, por la alta rentabilidad regularmente ofrecida y por las últimas tendencias alcistas del mercado, destaca la inversión en criptomonedas.
Aunque es difícil encontrar a alguien que hoy día no haya oído hablar nunca de ellas, no eludimos, en un esfuerzo de síntesis, señalar que son una forma de pago eminentemente virtual, libre de cualquier tipo de injerencia estatal, cuyo valor (convertible en moneda convencional acuñada, como dólares, euros, etc…) depende directamente del mercado.
Es decir, no atiende a ningún tipo de valor patrón, sino que su valor depende de la demanda de los inversores (para comprobar su valor: https://criptomoneda.ninja/cotizacion-precio/).
Si bien, la opción de invertir en criptomonedas es muy adecuada y recomendable para la mayor parte de perfiles de inversor, no es la única inversión posible. De hecho, tampoco la única deseable, ya que es una opinión compartida por la mayor parte de los asesores expertos en este sector, la de diversificar en lo posible y de forma razonable, la cartera de inversión de cada persona.
Ello es aún más importante en el caso de las personas que realizan dichas inversiones con vistas a emplear los beneficios (o su mayor parte), así como el capital destinado en ellas, tras su jubilación. Es recomendable informarse de la oferta existente referente a los Mejores planes de pensiones, así se reducen los riesgos en la medida de lo posible, y se aumentan las probabilidades de incremento patrimonial, llegado el momento de la jubilación.
Hipotecas
Durante los últimos años, se ha intentado fomentar por parte de instituciones, gobiernos y diversos entes privados así como centros de opinión, el alquiler en nuestro país. Esto no se ha hecho de forma gratuita, sino que es debido en opinión de los expertos, al elevado número de inmuebles y viviendas en desuso, muchos de ellos adquiridos por sus propietarios en época de bonanza económica con una finalidad inversora (principalmente especulativa).
No obstante, dichas aspiraciones económicas de los propietarios de inmuebles destinados a vivienda, se vieron frustradas, por un lado, a causa del abultado volumen de oferta de los mismos (y la consiguiente caída de los precios en algunos casos, que impedían vender) o, por otro, la escasas ofertas de financiación bancaria (con la precariedad en el mercado laboral), donde los bancos comenzaron a exigir mayores garantías de pago, lo cual hacía difícil la firma de contratos de hipoteca.
Aparte de todo lo anterior y continuando con una tradición muy arraigada en nuestra sociedad, la mayor parte de las personas aspira a comprar una casa. Los alquileres, no son lo que fueron, y por un poco más de dinero al mes, se pueden pagar los plazos de una hipoteca.
Sin embargo, este paso de contratar una hipoteca, no es un paso ligero, ni frívolo, sino que debe hacerse con las mayores garantías y el mayor número de opiniones posible. Entra aquí en juego la figura del Asesor hipotecario, entre cuyos cometidos se encuentra, informar al interesado acerca del mercado hipotecario, los diversos productos ofertados por las numerosas entidades financieras que operan en tal mercado, sus condiciones, riesgos y demás cuestiones que puedan generarse.
Es recomendable no aventurarse y confiar en profesionales expertos en cada sector, más aún cuando se trata de algo tan esencial como es la vivienda.
Todos los productos al mejor precio
Internet ofrece cualquier tipo de producto, y no en pocas ocasiones, a mejor precio que en cualquier tienda o comercio físico. Sin embargo, de manera inexorable, parecemos tender a la comodidad y, del mismo modo en que si no tenemos tiempo (por trabajo, vida familiar, etc…) para realizar las distintas compras en un establecimiento físico, muchas veces, por la misma falta de tiempo o por pereza, compramos la primera o segunda oferta que, considerada a buen precio, encaja en lo que buscamos.
Pero seamos honestos, si hago uso de internet para comprar, ¿voy a perder tiempo en comparar numerosas páginas web o plataformas que ofertan el mismo producto? Naturalmente que no, pero, ¿y si alguien ya se ha encargado de hacerlo por ti?
Existen webs especializadas, entre las que destacan como referentes en el sector productosincreibles.com, destinadas a ahorrar tiempo a cualquier persona que acuda directamente a ellas mediante sus sencillas guías de compra en internet.
El no aprovechar las comparativas de productos y las guías de compra puede suponer un grave error, de forma que a lo largo de un año podemos gastar mucho más de lo que deberíamos por el simple hecho de no comparar precios.
Con el tiempo, esa costumbre de escribir en los buscadores los productos que deseamos adquirir, caerá en desuso de manera generalizada, dado que el uso de las webs mencionadas, se habrá normalizado por las numerosas ventajas que plantean.