No es que sea lo más habitual del mundo, pero lo cierto es que a lo largo de la vida de una persona lo común es que al menos una vez se vea en la difícil tesitura de tener que tomar una decisión relacionada con la renovación de las ventanas de su vivienda.
Y es que, el elevado consumo energético que experimentan muchos hogares durante las estaciones de invierno y verano es en muchas ocasiones culpa de unos cerramientos que no proporcional el aislamiento adecuado, y que, por lo tanto, hacen que la temperatura varíe rápidamente y que el bolsillo se vacíe a un ritmo mayor del que debería. “Este es uno de los principales motivos que lleva a los particulares a plantearse un cambio de ventanas. Pero tomar la decisión es solo el principio de una serie de decisiones para las que es conveniente tener unas nociones básicas” comentan desde Becaisa, especialistas en ventanas de PVC y aluminio.
Entre las principales dudas que surgen a la hora de renovar las ventanas, una de las principales es si decantarse por la instalación de ventanas de PVC o por el contrario apostar por las ventanas de aluminio, ambas tienen pros y contras, pero quizás antes de entrar en los materiales deberían conocerse cuáles son las prestaciones que debe tener una buena ventana.
“Cualquier ventana debe permitir la iluminación natural y la visión hacia el exterior, debe proteger contra los ruidos exteriores y las inclemencias meteorológicas, es decir, aislar apropiadamente, proporcionar seguridad y una elevada durabilidad” indican desde Becaisa.
Y ahora que ya están claras las prestaciones que cualquier ventana debe tener, ¿qué?
Analizando las características anteriores se extraen las siguientes conclusiones, “tanto las ventanas de aluminio como las de PVC permiten la iluminación natural y la visión hacia el exterior. Por su parte, las ventanas de PVC garantizan un mayor aislamiento térmico y acústico, a la par que proporcionan una mayor seguridad y eficiencia energética que las de aluminio. En cuanto a la durabilidad, las de aluminio ganan el pulso”.
Además, cabe comentar que ambos materiales son reciclables, por lo que a la hora de renovarlas, en cualquier caso se estará poniendo un pequeño granito de arena en la lucha contra la contaminación y el cuidado del medio ambiente.
Y si la duda sigue sin disiparse, lo mejor es dejarse asesorar por los profesionales del sector.