El espacio de trabajo constituye un lugar clave en la vida de los empleados, ya que éstos emplean alrededor de 8 horas diarias, 5 días a la semana en él. Si eres dueño de un negocio o tienes una oficina, seguramente habrás oído que un espacio de trabajo y su ambiente pueden influir sobre la productividad de los trabajadores. Pero el orden y la disposición de los muebles no solo pueden afectar a la productividad de los empleados, sino también la imagen que la empresa ofrece, por ejemplo, a un cliente que visita las instalaciones.
Si estás pensando en establecer tu empresa por primera vez o en cambiar de localización, un consejo es el de escoger un espacio amplio, ya que, de este modo, será más fácil adaptar la oficina en el caso de que lleguen más empleados o la empresa tenga nuevas necesidades a medida que vaya pasando el tiempo.
Escoger un espacio amplio y diáfano en el que establecer mesas compartidas es una práctica que se encuentra muy de moda al fomentar la comunicación entre compañeros, sin embargo, asegúrate de conocer bien las preferencias de todos ellos, ya que es un método que algunos trabajadores no comparten al considerarlo poco efectivo a la hora de concentrarse.
Por lo tanto, si uno de tus objetivos es mejorar la productividad de tus empleados, deberías tener en cuenta que para ello es necesario que desconecten de sus tareas de vez en cuando. Para conseguirlo, instala un espacio confortable en el que tus trabajadores puedan desconectar y relajarse, aislado de los escritorios. Una opción es optar por varios sofás alrededor de una mesa, facilitando así el bonding entre compañeros. Además, si estableces puntos como la cocina, el baño o la sala de impresión a cierta distancia de la zona de trabajo, las personas tendrán que levantarse y andar un pequeño recorrido que puede ayudar a la desconexión y reducir el sedentarismo.
A su vez, otro consejo para establecer un buen espacio de trabajo que contribuya a la productividad común es el de mantener la oficina limpia, ordenada y despejada. Conciencia a tus empleados de la importancia de mantener sus escritorios aseados e instala cajoneras y armarios en los que puedan guardar sus pertenencias. Puedes usar estanterías, pero mantener demasiados objetos a la vista contribuirá a una imagen desordenada.
Por otra parte, a la hora de mantener los equipos ordenados, asegúrate de que el cableado se encuentra correctamente organizado. Un truco es el de agrupar los cables del equipo de cada trabajador juntos, para que éstos no se enreden entre sí, o aquellos cables que sean excesivamente largos no queden visibles por la pared o el suelo. Para ello, puedes hacer uso de bridas, que podrás encontrar en vendedores como RS Components a precios muy asequibles.
En resumen, mantener una oficina amplia y organizada tendrá un efecto positivo en la productividad de los empleados, ya que contribuirá a crear un espacio que transmita orden. Además, puedes involucrar a los trabajadores en el proceso a través de encuestas o reuniones en las que todos puedan participar. De este modo, tus empleados se sentirán involucrados, y el proceso de organización tendrá así un doble beneficio.