El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, se dirigirá a la nación el sábado por la mañana, según ha informado su oficina, en el contexto de un inminente voto de impeachment tras su intento de imponer la ley marcial. Esta será la primera aparición pública del líder, que revocó la orden de ley marcial el miércoles por la mañana, apenas seis horas después de haberla declarado. La decisión se produjo después de que el parlamento desafiara los cordones militares y policiales para votar en contra del decreto.
El viernes, el líder del Partido de Poder Popular (PPP), al que Yoon pertenece, manifestó que el presidente representa un peligro para el país y que debería ser destituido, aumentando así la presión sobre él para que renuncie, aunque más tarde los miembros del PPP reafirmaron su oposición formal al impeachment.
Los legisladores votarán sobre la moción de destitución presentada por el principal partido de oposición, el Partido Democrático, después de que Yoon sorprendiera a la nación el martes al otorgar a las fuerzas armadas poderes de emergencia para erradicar lo que él calificó de «fuerzas antiestatales» y superar la obstrucción de los opositores políticos.
Algunos miembros del PPP han instado a Yoon a renunciar antes de la votación, con el objetivo de evitar una repetición de la destitución de la expresidenta Park Geun-hye en 2016, quien dejó el cargo tras meses de protestas masivas relacionadas con un escándalo de tráfico de influencias. La caída de Park provocó el colapso del partido y una victoria de los liberales en las elecciones presidenciales y generales.
En un ambiente que recuerda a aquellas protestas, miles de manifestantes se congregaron el viernes por la noche frente al parlamento, sosteniendo velas y exigiendo la destitución de Yoon. Se anticipan más manifestaciones el sábado, días antes del voto.
Las autoridades, incluyendo fiscales, la policía y la Oficina de Investigación de Corrupción de Altos Funcionarios, han iniciado investigaciones sobre Yoon y altos funcionarios involucrados en el decreto de ley marcial, buscando posibles cargos de insurrección y abuso de poder, entre otros.