La semana comienza con una intensa actividad en los mercados asiáticos, donde se espera la publicación de los datos económicos mensuales de China. Este evento, frecuentemente denominado el ‘dumping de datos’, es un momento clave para los inversores que buscan mantener el impulso alcista del mercado de valores, sobre todo en un contexto donde los bancos centrales globales parecen inclinarse hacia políticas monetarias más expansivas.
La semana pasada, varios bancos centrales del grupo G10 decidieron reducir sus tasas de interés, y en el caso de Australia, se insinuó que podría haber un recorte pronto. Por su parte, las autoridades chinas han prometido un mayor enfoque en estímulos monetarios y fiscales, lo que ha alimentado el apetito por el riesgo en los mercados.
Decisiones de los bancos centrales y su impacto
Se anticipa que una nueva ronda de decisiones de los bancos centrales, incluido el de la Reserva Federal de EE.UU., influya en la dirección de los mercados esta semana. Según las proyecciones del mercado de futuros, es casi seguro que la Fed anunciará una reducción de un cuarto de punto en las tasas de interés. Mientras tanto, la atención se centrará en el Banco de Japón (BOJ), el cual está en un proceso de ‘normalización’ de su política tras años de tasas de interés cercanas a cero. Las recientes encuestas de condiciones empresariales en Japón han superado las expectativas, lo que podría allanar el camino para un eventual aumento de tasas.
En otro desarrollo significativo, el won surcoreano podría enfrentar presión adicional después de la destitución del presidente Yoon Suk Yeol el pasado sábado. Este evento se produce en medio de una crisis política notable, que se intensificó tras su sorprendente decisión de imponer la ley marcial el 3 de diciembre.
El calendario económico de este lunes en Asia está repleto de indicadores que podrían influir en los mercados, con un enfoque particular en los datos económicos de China, que incluyen producción industrial, inversión en activos fijos, ventas al por menor, precios de vivienda y tasas de desempleo.
Estos informes llegan días después de que Pekín anunciara la intención de aumentar el déficit presupuestario, emitir más deuda y aflojar aún más la política monetaria para estimular el crecimiento. China se prepara para un posible aumento de las tensiones comerciales con EE.UU., mientras que la secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, declaró que Washington no descarta sanciones adicionales a los bancos y restricciones sobre los tanqueros de «flota oscura».
Desde septiembre, los inversores han acogido con agrado los anuncios de estímulo por parte de Pekín. Sin embargo, el tiempo dirá si estas medidas serán suficientes para rescatar a la economía de un colapso en el sector inmobiliario y la deflación, reactivar el crecimiento y atraer inversiones de vuelta al país.
Se espera que los datos oficiales de este lunes indiquen que la tasa anual de crecimiento de la producción industrial y la inversión en activos fijos se mantuvo estable el mes pasado, mientras que el crecimiento de las ventas al por menor podría haber disminuido ligeramente. Además, se publicarán datos sobre los precios de la vivienda en noviembre, tras una caída del 5.9% en octubre, que marcó la mayor disminución en casi 20 años.
Estos acontecimientos, en un contexto de políticas de estímulo y medidas monetarias expansivas, reflejan la complejidad de la economía global actual y las diferentes estrategias adoptadas por los gobiernos que buscan navegar por un panorama lleno de desafíos.
