Los equipos de rescate han encontrado un nuevo cuerpo en las cercanías de Letur, en la provincia de Albacete, en el marco de las labores para recuperar a las personas desaparecidas tras las devastadoras riadas que azotaron la región. Este hallazgo se produjo en la confluencia entre el arroyo de la localidad y el río Segura, donde se ha identificado el cuerpo de un varón, aunque aún se desconoce su identidad.
El delegado de la Junta de Castilla-La Mancha en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos, ha informado que el cuerpo fue localizado en el final de la rambla del arroyo de Letur, en una zona donde se ha acumulado sedimento debido a las intensas lluvias y el arrastre del agua. Según sus declaraciones, «el cuerpo se ha encontrado al final de la rambla, en una especie de delta que se ha provocado por todo el arrastre que llevaron las tres riadas», agregando que se han retirado hasta dos metros de sedimento en esa área.
Recuperación de cuerpos y situación actual
Este nuevo hallazgo se suma a la recuperación del cuerpo de Antonia, una mujer de 71 años originaria de Molina de Segura, cuyo cadáver fue encontrado a 12 kilómetros de Letur. La riada, ocurrida el pasado 29 de septiembre, arrastró a las víctimas caudal abajo, generando un escenario de desolación en la localidad. El punto donde se encontró el nuevo cuerpo está a 5 kilómetros del lugar donde desaparecieron las víctimas.
Las autoridades continúan la búsqueda de Jonathan y Mónica, un matrimonio que desapareció cuando el arroyo se llevó por delante el balcón de su casa. Los equipos de rescate han sido informados de que ambos cuerpos serán sometidos a pruebas para determinar su identidad, y se espera que los resultados se den a conocer en breve. Hasta ahora, solo quedan dos cuerpos por encontrar.
La situación en Letur ha llevado a las autoridades a acordonar varias zonas del municipio debido a la aparición de socavones que representan un riesgo para la seguridad de los vecinos. Santi Cabañero, presidente de la Diputación, ha destacado que se han detectado «muchas situaciones de riesgo» en el casco urbano, donde se ha realizado un estudio inicial por parte del servicio de Arquitectura. La intervención de drones de la Guardia Civil ha permitido verificar la existencia de estos socavones, lo que ha llevado a la decisión de restringir el acceso a determinadas áreas.
Cabañero ha instado a la población a comprender que las medidas adoptadas son estrictamente por razones de seguridad, insistiendo en que «todas las decisiones que se están tomando es para garantizar la seguridad de todos y cada uno de los vecinos». En un esfuerzo por mantener a la comunidad informada, se planea difundir fotografías y advertencias a través del bando móvil del Ayuntamiento de Letur.
