El eco de las advertencias de Albert Rivera sobre el PSOE
El 22 de julio de 2019, Albert Rivera, entonces líder de Ciudadanos, realizó una intervención en el Congreso que se ha convertido en un hito en la memoria política reciente de España. En aquel discurso, Rivera alertó sobre un «plan» de Pedro Sánchez que, a su juicio, buscaba controlar las instituciones del Estado, así como los medios de comunicación y las encuestas, además de intentar «lavar la imagen» de sus socios políticos. En su crítica, Rivera utilizó términos contundentes, señalando que existía una «banda» dispuesta a «liquidar» España, haciendo referencia a los pactos del PSOE con partidos como Bildu y los independentistas catalanes. Con el paso del tiempo, muchos consideran que las advertencias de Rivera han encontrado eco en la realidad política actual.
Desde su retirada de la política activa en noviembre de 2019, tras unos resultados electorales desalentadores para su partido, donde Ciudadanos pasó de 57 a 10 diputados, Rivera ha mantenido un perfil bajo, realizando apariciones esporádicas. No obstante, su regreso al debate público ha suscitado interés, especialmente en relación con las acusaciones recientes de Víctor de Aldama contra el PSOE. A pesar de la presión mediática, Rivera ha optado por no profundizar en el análisis de la situación actual, declarando que prefiere dejar que los ciudadanos y los jueces se pronuncien al respecto.
En sus últimas intervenciones, Rivera ha reafirmado su decisión de mantenerse al margen de la política activa. Asegura que ya expresó su opinión sobre el «plan Sánchez» en su momento y que, en la política, lo importante no es tener razón, sino que se la reconozcan. Esta postura sugiere un deseo de evitar controversias y de permitir que el tiempo y los acontecimientos determinen el juicio sobre las acciones de los actores políticos actuales. Así, Rivera se distancia de una política que, según él, debe ser evaluada por los ciudadanos y las instancias judiciales correspondientes.