Recientemente, ha surgido un video que muestra a oficiales de reclutamiento militar y de policía en Ucrania utilizando un gas inflamable para intentar forzar la salida de un posible recluta de un vehículo. Este incidente, que ha generado una considerable controversia, tuvo lugar en Vyshgorod, en las afueras de Kiev, y ha sido ampliamente compartido en redes sociales.
En el clip de dos minutos, se puede observar a varios oficiales en uniforme camuflado y a dos policías tratando de abrir un coche estacionado. Un oficial de policía, vestido de negro, rocía un líquido en el interior del vehículo, mientras que un militar intenta doblar la puerta delantera. Posteriormente, uno de los oficiales en uniforme de reclutamiento enciende el gas, provocando una explosión de llamas. En el video, se escucha a uno de los oficiales riendo, lo que añade un tono inquietante a la situación.
El Ministerio de Defensa de Ucrania ha condenado este acto, calificándolo de inaceptable y afirmando que está colaborando con las autoridades para investigar el incidente. En un comunicado a través de Telegram, el ministerio aseguró que todos los implicados serán llevados ante la justicia, subrayando que tales acciones socavan la confianza en las fuerzas armadas ucranianas.
Reclutamiento en medio de la crisis
Este tipo de incidentes se producen en un contexto de creciente violencia en los esfuerzos de reclutamiento en Ucrania, donde el gobierno busca reponer sus pérdidas en el frente de batalla. La campaña de movilización ha estado marcada por casos de evasión del servicio militar y sobornos, lo que ha llevado a un clima de desconfianza y desesperación entre la población.
En los últimos meses, se han hecho más comunes los videos que documentan métodos de reclutamiento cada vez más agresivos. Ante la presión de las circunstancias, algunos aliados de Ucrania en la OTAN han sugerido reducir la edad de reclutamiento de 25 a 18 años. Recientemente, el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, declaró que Ucrania necesita enviar a los jóvenes «a la lucha».
Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha criticado esta posible medida, afirmando que sería un «crimen» y que, incluso si se bajara la edad de reclutamiento a 14 años, no cambiaría la situación en el campo de batalla. Putin ha insistido en que Rusia no está en guerra contra el pueblo ucraniano, sino contra un «régimen neo-nazi» en Kiev, acusando a la dirección ucraniana de cometer crímenes tanto contra ucranianos como rusos.
