Un avance en la transformación de la edad a través de la inteligencia artificial
Investigadores de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill y de la Universidad de Maryland han desarrollado un innovador método basado en inteligencia artificial llamado MyTimeMachine (MyTM). Este algoritmo permite la transformación personalizada de la edad en rostros humanos en imágenes y vídeos, haciendo posible que las personas aparezcan más jóvenes o mayores, teniendo en cuenta factores subjetivos que influyen en el proceso de envejecimiento. La metodología ha sido presentada en un artículo publicado en el servidor de preprints arXiv, y tiene el potencial de ser utilizada no solo en plataformas de edición de imágenes, sino también en las industrias del cine, televisión y entretenimiento.
La técnica de envejecimiento virtual ha encontrado aplicación en los efectos visuales (VFX) del cine, pero tradicionalmente ha requerido el uso de prótesis y maquillaje que resultan incómodos para los actores durante el rodaje. Roni Sengupta, uno de los supervisores de la investigación, menciona que la inspiración para este trabajo surgió del filme «El Irlandés» (2019), que utilizó efectos visuales revolucionarios para rejuvenecer digitalmente a los actores, aunque el proceso fue costoso y laborioso. A diferencia de los filtros de redes sociales que tienden a ofrecer resultados simplistas, MyTM busca crear transformaciones de edad más realistas y ajustadas a la individualidad de cada persona.
El modelo MyTM se basa en una red neuronal generativa que simula la trayectoria de envejecimiento de personas específicas, produciendo imágenes realistas en distintas etapas de la vida. Con aproximadamente 50 imágenes de entrada, el algoritmo es capaz de predecir progresiones de envejecimiento que reflejan cambios en la textura de la piel y la estructura facial. En pruebas iniciales, MyTM ha mostrado una notable capacidad para generar simulaciones de envejecimiento que consideran factores externos como la etnicidad y el estilo de vida. Esta innovación podría revolucionar la producción cinematográfica, facilitando efectos de re-envejecimiento de alta calidad a un costo reducido y haciendo accesibles estas herramientas a creadores de contenido de todos los niveles.
