El Parker Solar Probe y su histórica aproximación al Sol
El Parker Solar Probe de la NASA ha llevado a cabo una histórica aproximación al Sol, volando a solo 3,8 millones de millas (6,1 millones de kilómetros) de su superficie. Este hito, alcanzado la víspera de Navidad, representa la aproximación más cercana al Sol realizada por cualquier objeto creado por el ser humano. Durante este evento, la sonda alcanzó una velocidad asombrosa de 430,000 millas por hora (690,000 kilómetros por hora), convirtiéndose así en la nave espacial más rápida jamás construida. La misión, diseñada para estudiar el Sol como nunca antes, tiene como objetivo desentrañar los misterios de la atmósfera solar, particularmente el fenómeno de que las capas externas, como la corona, son significativamente más calientes que la superficie del astro.
Los científicos se encuentran en un estado de expectación tras el exitoso acercamiento, esperando recibir un «señal de estado» de la sonda el 27 de diciembre. Esta comunicación permitirá a los investigadores confirmar que la sonda ha sobrevivido el arduo viaje. Hasta la fecha, la última transmisión de la Parker Solar Probe fue el 20 de diciembre, indicando que todos los sistemas funcionaban con normalidad. Este seguimiento es crucial para el equipo de la misión, que está ansioso por evaluar la salud general de la sonda y verificar que se han recopilado los datos planificados durante la aproximación.
El Parker Solar Probe fue lanzado en 2018 y ha realizado múltiples sobrevuelo alrededor de Venus para aumentar su velocidad y acercarse al Sol. Con al menos dos órbitas adicionales programadas a esta velocidad y distancia, la sonda seguirá proporcionando información valiosa sobre el Sol. La ciencia detrás de esta misión representa una de las iniciativas más audaces de la NASA para responder a preguntas fundamentales sobre nuestro universo. La primera transmisión de datos científicos de la sonda, provenientes de esta extraordinaria aproximación, se espera que llegue a la Tierra a finales de enero.