Gerard Farrés y su regreso al Dakar: Un nuevo capítulo en la aventura del piloto catalán
Gerard Farrés, un veterano del Dakar, se prepara para afrontar su 18ª edición de esta emblemática carrera. Desde su debut en 2006, cuando el rally se celebraba en África, Farrés ha recorrido un camino lleno de retos y logros. Su trayectoria incluye ser el mejor ‘rookie’ en su primer año y acompañar al pentacampeón Marc Coma como mochilero. Sin embargo, su mayor hito llegó en 2017, cuando logró un notable tercer puesto montando una moto con un equipo privado, Himoinsa. En 2019, Farrés cambió de rumbo al adentrarse en el mundo de los todoterreno ligeros (SSV), donde ha tenido un comienzo prometedor al finalizar en segundo lugar en su primera participación.
Este año, Farrés se une al Team Pedregà en la categoría T4, con el ibicenco Toni Vingut como copiloto. Su entusiasmo por el nuevo proyecto es palpable, especialmente después de un periodo de incertidumbre que casi lo aparta de la carrera. «Han sido meses ajetreados, teníamos todo atado para ir con otro equipo y el mes de octubre se canceló», explica Farrés, quien se muestra optimista ante la oportunidad que se presenta. Reconoce que el Dakar será un desafío complicado, pero su motivación y la calidad del equipo le dan esperanzas para afrontar esta nueva aventura.
Farrés también reflexiona sobre su evolución como piloto. Aunque considera que competir por la victoria en esta edición sería irrealista debido a los cambios en su equipo y en su copiloto, se compromete a dar lo mejor de sí cada día y a aprovechar al máximo el potencial que ofrece el nuevo equipo. Su deseo de ganar el Dakar permanece intacto, y aunque el camino es largo y lleno de obstáculos, mantiene la ambición de crecer junto a sus compañeros. El Dakar no solo representa una carrera, sino una experiencia de superación personal, donde la camaradería y la capacidad de adaptación son clave para afrontar los retos que surgen en el desierto.