El impacto de las apuestas en el tenis: un problema que crece
Que el mundo de los amaños y las apuestas ilegales representa un desafío significativo para el tenis es algo ampliamente conocido. Sin embargo, la problemática no se limita a las prácticas ilícitas. Las apuestas legales, reguladas y aceptadas, también generan preocupaciones para los jugadores, especialmente en torneos de menor relevancia y en las categorías más bajas del ránking. Este entorno se convierte en un caldo de cultivo para el acoso y la violencia verbal, manifestándose de manera notable a través de las redes sociales.
Un reciente informe elaborado por la Federación Internacional de Tenis (ITF), la Asociación Femenina de Tenis (WTA), el Club de Tenis de Wimbledon (AELTC) y la Asociación Estadounidense de Tenis (USTA) ha puesto de manifiesto la magnitud de este problema. Según este estudio, casi la mitad de los mensajes de odio dirigidos a los tenistas provienen de apostadores insatisfechos. Utilizando un algoritmo de Inteligencia Artificial llamado Threat Matrix, se ha monitoreado el contenido en las principales redes sociales —X (anteriormente Twitter), Instagram, YouTube, Facebook y TikTok—, identificando abusos y comentarios de acoso hacia más de 8.000 jugadores.
La vigilancia abarcó cerca de 2,5 millones de publicaciones, revelando que alrededor de 12.000 de ellas fueron clasificadas como abusivas. Los «apostadores enfadados» constituyen el 48% de estos abusos, que van desde insultos hasta amenazas directas. La investigación también señala que durante los torneos más visibles, como los Grand Slams, el número de comentarios abusivos aumenta considerablemente, con un notable incremento en el contenido sexista y sexualmente explícito. Jugadores como Victoria Azarenka y Caroline García han expresado su preocupación por el ambiente hostil que se ha creado, señalando que las redes sociales deben implementar medidas más efectivas para filtrar y denunciar estos contenidos dañinos.
