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Manual de papiroflexia es la fascinante biografía del hombre que intentó asesinar a Franco al menos en cinco ocasiones. Todo empezó en julio de 1938, durante la Batalla del Ebro, cuando un miliciano de guardia encuentra al otro lado de sus prismáticos la figura del general Franco. El ejército sublevado se había equivocado al valorar la penetración de la ofensiva republicana y parece que están instalando allí́ cerca un puesto de mando. El miliciano carga su fusil y a través de la mira sigue los movimientos del general dispuesto a disparar, pero, en el último segundo, desiste.
Ese soldado de la República fue Miguel Yoberti, un extremeño con apellido italiano que llegó a ser teniente de ingenieros, cuya unidad fue capturada por los rebeldes pocas horas después de aquella oportunidad histórica de desequilibrar la guerra en julio de 1938.
Tras sobrevivir a un pelotón de un pelotón de fusilamiento y pasar meses en las montañas de Sierra Morena con el maquis, Yoberti logra llegar a Casablanca, en Marruecos, pero allí es traicionado y entregado a las autoridades del Tercer Reich, que lo deportan a un campo de concentración acusado de otro delito. Logra sobrevivir gracias a que sabe hablar varios idiomas, entre ellos francés. Tras la liberación se traslada México, donde es reclutado por el Gobierno de la República en el exilio para atentar contra la vida de Franco.
Usando diferentes nombres y personalidades Yoberti sobrevive en Los Ángeles y en Nueva York como asesino a sueldo, donde prepara otros tres atentados para acabar con el dictador español, cada uno con diferentes resultados. Algunos de estos intentos de magnicidio están documentados porque fueron abortados por las autoridades españolas; en otros, simplemente fue la suerte del general lo que le libró de una muerte segura. Con razón, desde sus primeros destinos en África se rumoreaba que Franco tenía una protección celestial contra la muerte que los moros rifeños llamaban baraka y que hasta el último día de su vida le sirvió para sobrevivir política y personalmente. «Uno está unido a su destino como un asno a su ronzal», llegó a decir de sí mismo.
Manual de papiroflexia es el resultado de las numerosas conversaciones que su autor, Carlos Kaplan (Madrid, 1970) mantuvo durante casi dos años con Miguel Yoberti, así como con otras personas relacionadas directa o indirectamente con él y con su azarosa vida. Para completar la redacción del manuscrito Kaplan desordenó cuantas hemerotecas y centros documentales estuvieron a su alcance a ambos lados del Atlántico pues, según sus propias palabras, la intención era dotar a libro de valor histórico. Sin embargo, numerosos pasajes y datos no han podido contrastarse con el rigor que la historiografía requiere, dando como resultado nada más que una novela. El curioso lector sabrá diferenciar la realidad de la ficción, tan fácilmente como se distingue la madera del barro.