El aterrizaje histórico del Blue Ghost en la Luna
El módulo lunar Blue Ghost de Firefly Aerospace ha realizado con éxito su aterrizaje en la superficie lunar, marcando un hito significativo en la exploración espacial privada. Este evento, que tuvo lugar el 2 de marzo, fue celebrado por la comunidad científica y tecnológica, ya que se trató de una operación compleja que implicó maniobras de evitación de peligros y un aterrizaje preciso en el Mare Crisium, cerca del volcán Mons Latreille. Apenas unas horas después del aterrizaje, Firefly Aerospace compartió impresionantes imágenes de la Tierra vistas desde la Luna, capturadas por su nuevo módulo.
El Blue Ghost realizó dos maniobras para evitar obstáculos y logró aterrizar a menos de 100 metros de su zona objetivo, un logro que demuestra el avance en la tecnología de aterrizaje lunar. Durante una conferencia de prensa, Joel Kearns, administrador adjunto de la NASA, destacó la complejidad de esta hazaña técnica. Aunque no se realizó una transmisión en vivo del aterrizaje para priorizar el uso del ancho de banda en los datos de telemetría y en los sistemas instrumentales críticos, el equipo de Firefly se mostró satisfecho con la operación, que incluyó la utilización de un sistema de evitación de peligros que ayudó a eludir rocas potencialmente peligrosas en la superficie lunar.
Una de las principales características de esta misión es que el Blue Ghost llevará a cabo 14 días de operaciones en la superficie lunar, lo que equivale a un día completo en la Luna. Durante este tiempo, el módulo tiene la intención de recopilar datos científicos de sus diez cargas útiles. Uno de los eventos más destacados será la captura de imágenes de un eclipse total desde la perspectiva lunar el 14 de marzo, cuando la Tierra oscurezca el sol. Este tipo de exploración no solo amplía nuestro conocimiento sobre la Luna, sino que también subraya el papel creciente de la empresa privada en la exploración espacial.
