En los últimos años, el turismo femenino ha experimentado un notable auge, con un porcentaje creciente de mujeres que optan por viajar solas. Según un informe de tendencias de Virtuoso de agosto de 2024, el 71% de los viajeros en solitario son mujeres, y de estas, un 25% tienen 65 años o más. Este fenómeno refleja cambios en las normas sociales y una mayor independencia financiera que permite a las mujeres explorar el mundo de manera más activa.
Las mujeres viajeras buscan experiencias auténticas, alejándose del turismo convencional de «playa y relax». Un estudio global de rescate reveló que las aventuras y las experiencias culturales tienen el mismo peso en sus decisiones. Este deseo de involucrarse más profundamente con las prácticas y costumbres locales ha llevado a un incremento de emprendedoras que aportan una perspectiva femenina al sector turístico.
Una búsqueda de autenticidad en los viajes
Históricamente, muchas mujeres no han tenido la oportunidad de viajar durante su juventud debido a responsabilidades familiares, laborales o factores socioeconómicos. Como resultado, su primera experiencia en un viaje más extenso suele producirse en etapas posteriores de la vida, lo que las lleva a preferir grupos pequeños y más íntimos.
Ellen Flowers, bloguera de viajes, explica que existe un creciente interés por explorar destinos encantadores que ofrezcan cultura rica y conexiones locales. En lugar de las grandes ciudades, las mujeres viajeras se sienten atraídas por aldeas ocultas en la campiña francesa o pueblos costeros en Portugal, donde pueden disfrutar de un ritmo de vida más pausado y enriquecedor.
Gabrielle Wise, fundadora de Walk Talk Eat France, se ha especializado en tours culinarios en la campiña francesa, donde ofrece retiros relajantes que permiten a las mujeres disfrutar de la gastronomía local en un ambiente acogedor. Este enfoque ha permitido a muchas de sus clientas forjar amistades duraderas durante sus viajes.
Por otro lado, el turismo de intereses específicos ha comenzado a ganar terreno, con un mercado proyectado de 5.1 mil millones de euros para 2025. Tours de jardinería, pintura y cocina están en auge, y las mujeres buscan aprender y experimentar durante sus vacaciones, en vez de simplemente descansar.
Además, muchas mujeres interesadas en el turismo buscan comprender cómo viven otras mujeres en diferentes culturas, apoyando a emprendedoras locales y pasando tiempo con artesanas. Este enfoque permite una conexión más significativa que en grupos mixtos, lo que a su vez fomenta un entendimiento cultural más profundo.
Las vacaciones activas también son una tendencia creciente, ofreciendo una sensación de logro y conexión social a través de actividades como senderismo y ciclismo, donde se favorece un ejercicio de bajo impacto. Walking Women, una compañía británica que ofrece vacaciones de senderismo solo para mujeres, ha visto un aumento en la demanda debido a su enfoque en la cultura local y en garantizar que todas las participantes alcancen las metas establecidas.
Por último, es evidente que las mujeres de todas las edades están cada vez más dispuestas a desafiarse a sí mismas y explorar lo desconocido, demostrando que la búsqueda de aventuras no tiene fecha de caducidad. Este cambio en la mentalidad también ha influido en la industria de cruceros, donde se están introduciendo excursiones exclusivas para mujeres que incluyen actividades de aventura y exploración.
Sin embargo, a pesar de este avance, la seguridad sigue siendo una preocupación primordial para las viajeras. Diversas compañías de turismo dirigidas por mujeres enfatizan la importancia de asociarse con hoteles y guías locales también dirigidos por mujeres, creando así un ambiente más seguro y cómodo. Iniciativas como chats de apoyo en tiempo real y líneas de emergencia son fundamentales para garantizar que las viajeras se sientan protegidas durante sus aventuras.
