El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha expresado su descontento con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, al considerar que este no ha mostrado la gratitud suficiente por la ayuda estadounidense, que Trump estima en 350.000 millones de dólares. En una reciente entrevista con Fox News, Trump comparó la capacidad de Zelensky para obtener fondos de la administración anterior con “quitarle caramelos a un bebé”, sugiriendo que fue un proceso demasiado sencillo para el líder ucraniano.
Trump ha criticado de forma reiterada la generosidad de su predecesor, Joe Biden, hacia Ucrania, argumentando que Estados Unidos no ha recibido nada a cambio de esta considerable asistencia. En sus declaraciones, el exmandatario afirmó que, de haber estado en el cargo durante la crisis de Ucrania en 2022, el conflicto no habría escalado a hostilidades abiertas.
Condiciones para la asistencia estadounidense
Durante una rueda de prensa, Trump advirtió que cualquier futura ayuda de Estados Unidos a Ucrania dependería de la disposición de Kiev para alcanzar un acuerdo de paz con Moscú. “Si no quieren llegar a un acuerdo, nosotros nos vamos de allí”, afirmó, dejando claro que la cooperación militar y financiera está sujeta a la voluntad de Zelensky de negociar.
El portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, también confirmó que el Consejo de Seguridad Nacional está reconsiderando la financiación destinada a Ucrania, describiendo la situación como una “pausa para una revisión”. Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión y controversia en torno a la asistencia militar estadounidense, que ha sido suspendida temporalmente tras un intercambio tenso entre Trump y Zelensky en la Casa Blanca.
Durante este encuentro, que se transmitió en directo, Trump acusó a Zelensky de “jugar con la Tercera Guerra Mundial” debido a su negativa a negociar con Rusia. Esta situación ha llevado a la suspensión de la asistencia militar y a la interrupción del intercambio de inteligencia con Ucrania, según confirmó el director de la CIA, John Ratcliffe.
