Elon Musk, el magnate tecnológico y propietario de la plataforma de redes sociales X, ha afirmado que su servicio sufrió un “ciberataque masivo” el pasado lunes. Según Downdetector, un sitio web que monitoriza interrupciones en servicios online, más de 60,000 usuarios reportaron problemas de acceso a la plataforma durante el día.
En un mensaje publicado en su cuenta personal, Musk indicó que, aunque su plataforma es atacada diariamente, este incidente fue particularmente significativo por los “recursos” implicados, sugiriendo que podría tratarse de un “grupo coordinado y/o un país” detrás del ataque. Además, respondió afirmativamente a un usuario que insinuó que “quieren silenciarlo a él y a esta plataforma”.
Problemas técnicos y protestas
Los problemas técnicos en X se manifestaron en forma de mensajes de error de Cloudflare, un proveedor de servicios de ciberseguridad, que indicaban que el “servidor web está devolviendo un error desconocido”. Este tipo de incidentes no es nuevo para la plataforma, que ya había experimentado una interrupción significativa el pasado agosto.
En otro giro de los acontecimientos, Musk acusó a ActBlue, una plataforma de recaudación de fondos vinculada a figuras demócratas como George Soros, de orquestar un ataque coordinado contra su empresa Tesla. En sus declaraciones, Musk mencionó que una investigación había identificado a cinco grupos financiados por ActBlue como responsables de protestas contra Tesla, que han tenido lugar en más de 50 localidades de Estados Unidos en las últimas semanas. Aunque la mayoría de las manifestaciones se limitaron a exigir que Musk “se vaya”, algunos concesionarios sufrieron daños materiales.
Recientemente, varios vehículos Cybertruck fueron incendiados en Seattle, y un incidente similar ocurrió en Loveland, Colorado. En un ataque anterior, un negocio fue blanco de un incendio provocado, con un sospechoso detenido posteriormente. Este tipo de protestas ha generado un clima de tensión en torno a la figura de Musk, quien ha visto un cambio en su imagen pública, pasando de ser un crítico de la política demócrata a convertirse en un aliado cercano de Donald Trump.
Desde el intento de asesinato fallido que sufrió el pasado julio, Musk ha adoptado posturas más alineadas con la derecha política estadounidense, incluso liderando un nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) que busca abordar el despilfarro y la mala gestión en las agencias gubernamentales.
