Avances en xenotransplantación: riñones y posibles hígados de cerdo
Investigadores chinos han dado un paso significativo en la búsqueda de soluciones para la escasez de órganos humanos mediante la xenotransplantación, un proceso que implica el uso de órganos de animales para trasplantes en humanos. Recientemente, se ha informado sobre el éxito de un trasplante de riñón de cerdo en un paciente chino, quien se convierte en la tercera persona en el mundo que vive con un riñón de cerdo genéticamente modificado. Además, el equipo de investigación ha llevado a cabo un experimento en el que se implantó un hígado de cerdo en un paciente con muerte cerebral, abriendo nuevas posibilidades en este campo.
El trasplante de riñón ha mostrado resultados positivos, con el paciente, una mujer de 69 años diagnosticada con insuficiencia renal hace ocho años, recuperándose satisfactoriamente. El doctor Lin Wang, del Hospital Xijing de la Universidad Militar Cuarta de Xi’an, ha indicado que el riñón del cerdo está funcionando adecuadamente. Esta investigación se enmarca en un esfuerzo más amplio por modificar genéticamente a los cerdos, con el fin de que sus órganos se asemejen más a los humanos y puedan ser utilizados para aliviar la creciente demanda de trasplantes.
En cuanto al hígado de cerdo, el equipo de Wang ha publicado en la revista Nature que el órgano trasplantado en un cuerpo sin vida logró sobrevivir durante diez días sin signos tempranos de rechazo. Aunque el hígado de cerdo no produce bilis y albúmina en las mismas cantidades que un hígado humano, su funcionalidad básica sugiere que podría ser útil para apoyar a pacientes con hígados fallidos. Sin embargo, la complejidad del hígado humano, que desempeña múltiples funciones vitales, plantea nuevos desafíos en la investigación. A pesar de los avances, expertos en el campo han señalado que aún quedan muchas preguntas por responder sobre la viabilidad de estos órganos en humanos.
