
Un hallazgo que redefine los inicios del universo
Un equipo de científicos ha logrado identificar una galaxia ancestral y distante gracias al Telescopio Espacial James Webb, lo que proporciona evidencia de que un periodo de transición crucial que sacó al universo temprano de sus «edades oscuras» ocurrió antes de lo que se había estimado previamente. Esta galaxia, conocida como JADES-GS-z13-1, fue observada en un momento en el que existía aproximadamente 330 millones de años después del Big Bang, evento que dio origen al universo hace unos 13.8 mil millones de años. En contraste, nuestro planeta Tierra tiene alrededor de 4.5 mil millones de años de antigüedad.
Se cree que el universo experimentó una expansión rápida y exponencial en una fracción de segundo tras el Big Bang. Después de enfriarse lo suficiente, se produjo una etapa denominada «edades oscuras cósmicas», durante la cual el universo joven estuvo envuelto en una densa niebla de gas hidrógeno en un estado eléctricamente neutral. Posteriormente, comenzó la época de la reionización, momento en el que el universo empezó a brillar. Los datos obtenidos por Webb sugieren que JADES-GS-z13-1, considerada una de las galaxias más antiguas conocidas, ya había iniciado este proceso de reionización.
El astrofísico Joris Witstok, del Centro Cosmic Dawn de la Universidad de Copenhague y autor principal del estudio publicado en la revista Nature, afirmó que «en JADES-GS-z13-1, Webb ha confirmado una de las galaxias más distantes conocidas hasta la fecha». A diferencia de otras galaxias de similar antigüedad, esta muestra una clara firma que sugiere la presencia de una fuente poderosa de radiación ultravioleta, lo que indica un comienzo inesperadamente temprano de la reionización. Este fenómeno, que marca la formación de las primeras estrellas, agujeros negros y galaxias, permitió que la radiación ultravioleta escapara, iluminando así el cosmos.