El rey Carlos III de Inglaterra ha sido ingresado temporalmente en la London Clinic tras una visita programada relacionada con su tratamiento contra el cáncer. Según fuentes oficiales, el monarca estuvo en un “breve periodo de observación” debido a los efectos secundarios del tratamiento, aunque fue dado de alta poco después y ya se encuentra en su residencia habitual, Clarence House, en Londres.
Este incidente ha llevado a la cancelación de varios compromisos oficiales. Carlos III debía recibir las credenciales de embajadores de tres naciones diferentes y tenía programados cuatro compromisos públicos en Birmingham para el día siguiente. Un portavoz del palacio de Buckingham ha expresado que el rey está decepcionado por no poder asistir a estos eventos y ha ofrecido sus más sinceras disculpas a quienes trabajaron para hacer posible su visita.
Avance en la recuperación
A pesar de este contratiempo, la casa real ha intentado restar importancia a lo sucedido, asegurando que la recuperación del monarca sigue avanzando en la dirección correcta. Hasta el momento, no se prevé la cancelación de otros compromisos programados para las próximas semanas, incluida una visita de Estado a Italia que se llevará a cabo entre el 7 y el 10 de abril. El rey ha podido continuar trabajando desde su residencia y se mantiene en buena forma.
El rey Carlos III anunció su diagnóstico de cáncer en febrero de 2024, tras someterse a una operación por agrandamiento de próstata, una intervención que no está relacionada con la enfermedad. Desde entonces, ha participado en actos públicos y ha mantenido su agenda como jefe de Estado, incluyendo visitas al extranjero. A sus 76 años, el monarca ha mostrado una apertura sin precedentes al hablar sobre su enfermedad, algo que ha sido poco habitual en la familia real británica hasta hace poco.
