Perspectivas de un nuevo acuerdo entre EE.UU. e Irán: ¿una oportunidad para la diplomacia en Oriente Medio?

In Internacional
abril 25, 2025

Las negociaciones entre Estados Unidos e Irán se encuentran en un momento crucial, donde diversos intereses están en juego. La reciente llegada de una tendencia moderada al poder en Irán coincide con el liderazgo de Donald Trump en Estados Unidos, lo que representa una revitalización de una facción dentro del Partido Republicano. Sin embargo, el tema nuclear, que se había considerado resuelto durante un breve periodo, ha vuelto a ser el principal desafío tras la retirada unilateral de Trump del Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA) en 2018.

Este asunto, aunque ha sido un pretexto habitual para la fricción política, no es intrínsecamente alarmante, dado su historial de dos décadas. No obstante, sigue siendo el eje central de las tensiones entre ambos países. Para entender los desafíos en las relaciones entre Irán y Estados Unidos, es fundamental evaluar las posiciones e intereses de los actores clave en la región.

Intereses Regionales y Globales

Los estados árabes de la región han adoptado una postura notablemente más amistosa hacia Irán en comparación con los periodos de negociaciones del JCPOA. Las relaciones entre Irán y Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y Bahréin, que anteriormente estaban tensas, han evolucionado hacia una amistad cautelosa, si no cálida. Dada su proximidad geográfica a Irán y sus profundos lazos con Estados Unidos, Europa, China y Rusia, este cambio tiene importantes implicaciones para las políticas de las grandes potencias respecto al programa nuclear iraní.

Por otro lado, Israel ha visto cualquier mejora en las relaciones de Irán con Occidente, especialmente con Estados Unidos, como una línea roja estratégica. Durante las negociaciones del JCPOA y la implementación del acuerdo bajo la administración de Obama, Israel hizo todo lo posible por socavar cualquier resolución a los conflictos que involucraran a Irán. Para Israel, el contenido del asunto es secundario; su utilidad radica en la capacidad de securitizar a Irán, aislándolo y presionándolo, un objetivo que considera cumplido mientras esta dinámica persista.

La Unión Europea, a pesar de ser una entidad diversa con más de 20 estados miembros, sigue en gran medida el liderazgo de Francia, Alemania y el Reino Unido en política exterior. Aunque estos países abogan públicamente por soluciones diplomáticas, su postura hacia Irán se ha endurecido considerablemente desde el periodo 2013-2018. Su control exclusivo sobre el mecanismo de resolución de disputas del JCPOA, conocido como el “snapback”, ha añadido una dimensión identitaria a la cuestión, lo que dificulta la posibilidad de iniciativas diplomáticas audaces.

Rusia, como uno de los socios más significativos de Irán, ha mantenido una posición destacada en el futuro previsible de las negociaciones. Las relaciones Irán-Rusia han madurado en comparación con el periodo de negociación del JCPOA, mientras que los lazos de Moscú con Washington han entrado en un territorio inexplorado, influenciados por la guerra en Ucrania. Sin embargo, históricamente, Rusia no favorece una escalada de las tensiones entre Irán y Occidente, ni se beneficia de una reconciliación completa. Esto sugiere que los responsables de la política iraní deben acercarse a Moscú de manera estratégica.

China, aunque distante, se presenta como un actor consistente en sus posiciones declaradas. Beijing se beneficia indirectamente de las sanciones impuestas a Irán, pero también podría obtener ganancias de su levantamiento, lo que abriría un mercado relativamente inexplorado para inversores y contratistas chinos. Al igual que Rusia, China busca prevenir un aumento de las tensiones entre Irán y Occidente, pero no necesariamente da la bienvenida a una reconciliación excesiva que podría intensificar la competencia en el mercado iraní.

Los actores regionales, incluidos los aliados de Irán en Asia Occidental, nunca se han opuesto a una resolución de las disputas de Irán con Occidente. Con el Eje de Resistencia enfrentando reveses militares en el último año, uno de los principales pretextos del Oeste, y particularmente de Israel, para desafiar el papel regional de Irán ha perdido fuerza.

Antes de iniciar las negociaciones recientes, tanto Irán como Estados Unidos emplearon un enfoque de zanahoria y palo, combinando gestos diplomáticos con amenazas veladas. Sin embargo, aferrarse a políticas obsoletas no producirá soluciones innovadoras en la política global. Los actores occidentales deben reconocer que los responsables de la política iraní, con más de cuatro décadas de experiencia en la gestión de un país bajo presión, no se dejarán intimidar por amenazas familiares. Tales tácticas pueden erosionar la credibilidad de Occidente en la búsqueda de una resolución diplomática equilibrada.

Este análisis propone varias recomendaciones prácticas para asegurar un enfoque pragmático y fructífero en las conversaciones:

  1. Estados Unidos debe unificar su postura interna para que voces dispares no socaven el progreso alcanzado.
  2. Ambas partes deben abandonar la postura tradicional basada en amenazas para reforzar su apalancamiento negociador, enfatizando un compromiso transparente con soluciones pacíficas y diplomáticas.
  3. Trump debe limitar la capacidad de Israel para descarrilar una iniciativa que él mismo promueve, utilizando su influencia como su principal respaldo.
  4. Estados Unidos debe alinear a sus aliados europeos para evitar que sus declaraciones o acciones obstruyan los esfuerzos de resolución.
  5. Irán debe involucrar a Rusia, China y Europa para minimizar fricciones innecesarias y asegurar una cooperación significativa.
  6. Los estados árabes regionales deben ser convocados para desescalar tensiones y fomentar un paradigma de “región fuerte”, más allá del enfoque en el “estado fuerte”.
  7. La capacidad positiva de la Agencia Internacional de Energía Atómica debe ser utilizada para compartmentalizar asuntos, evitando que cuestiones ajenas descarrilen los resultados potenciales.

Si se persiguen estos pasos con previsión estratégica, podrían allanar el camino hacia una resolución sostenible de un estancamiento que se prolonga durante décadas.

/ Published posts: 13848

Diario obrero y republicano fundado el 14 de Abril de 2006.