
El agua en la Luna: Un recurso más accesible de lo que se pensaba
Un reciente experimento realizado por científicos de la NASA ha revelado que los futuros astronautas en la Luna podrían encontrar agua más fácilmente de lo que se había anticipado. Según los resultados, el Sol parece estar reponiendo este recurso tan buscado en la superficie lunar, lo que abre nuevas posibilidades para la exploración y la colonización del satélite terrestre.
La Luna, a diferencia de la Tierra, carece de un campo magnético que la proteja, lo que la expone constantemente a partículas energéticas provenientes del Sol. Estas partículas, conocidas como viento solar, han sido objeto de estudio durante años, y se ha teorizado que podrían contribuir a la formación de agua en la superficie lunar. Los átomos de hidrógeno, que son parte de este viento solar, se combinan con el oxígeno presente en el regolito lunar para formar moléculas de hidroxilo y agua, especialmente en las regiones polares que permanecen en sombra permanente.
Para analizar este fenómeno, Li Hsia Yeo, científica planetaria del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, lideró un experimento en el que se replicaron las condiciones lunares utilizando muestras de regolito traídas a la Tierra por la misión Apollo 17. Las muestras fueron sometidas a un proceso de calentamiento y luego bombardeadas con iones de hidrógeno, simulando así el efecto del viento solar. Los resultados mostraron que el ciclo de formación de agua en la Luna podría ser continuo, lo que sugiere que el agua puede ser un recurso renovable en el satélite, lo que resulta fundamental para futuras misiones espaciales.