Las principales marcas de calzado en Estados Unidos han solicitado al presidente Donald Trump un alivio en las tarifas impuestas recientemente. La Footwear Distributors and Retailers of America (FDRA), un grupo comercial que representa a la industria del calzado, envió una carta a la Casa Blanca esta semana en la que advierte que las tarifas de reciprocidad, introducidas por la administración Trump, suponen una «amenaza existencial» para la industria del calzado estadounidense.
La carta, firmada por 76 marcas, incluidas gigantes como Nike, Adidas, Skechers y Under Armour, señala que muchas de estas empresas, que producen calzado asequible para familias trabajadoras de ingresos bajos y medios, no pueden absorber tarifas tan elevadas ni trasladar estos costos a los consumidores. Sin un alivio inmediato, muchas de estas compañías podrían verse obligadas a cerrar sus puertas.
Impacto de las tarifas en la industria del calzado
La FDRA ha indicado que muchas órdenes de productos han sido suspendidas y que el inventario de calzado para los consumidores estadounidenses podría escasear pronto. Las tarifas aplicadas por Trump, anunciadas el pasado 2 de abril, incluyen gravámenes sobre países que son fuentes clave de suministros para el calzado, como China, Vietnam y Camboya. Aunque las tarifas iniciales superiores al 45% para Vietnam y Camboya fueron reducidas a un 10% durante un periodo de 90 días, los aranceles sobre las importaciones chinas han aumentado, alcanzando un 145% efectivo.
Los aranceles más altos sobre decenas de socios comerciales están programados para reanudarse a principios de julio. En este contexto, Adidas ha advertido que estas tarifas llevarán a un aumento de precios para los consumidores estadounidenses. De hecho, el director financiero de Nike ya había señalado anteriormente que los gravámenes y la incertidumbre económica resultarían en ventas más bajas en el trimestre actual.
La carta de la asociación del calzado también subraya que la industria ya enfrentaba tarifas significativas sobre productos como zapatos para niños antes de que Trump anunciara sus aranceles generales. En total, las empresas estadounidenses de calzado enfrentarán tarifas que oscilarán entre el 150% y el 220%, según la FDRA.
La asociación ha hecho un llamado urgente a la acción, afirmando que «la industria del calzado estadounidense no tiene meses para ajustar sus modelos de negocio y cadenas de suministro mientras absorbe este régimen arancelario sin precedentes y no previsto». Además, advierte que las tarifas no conseguirán, como prometió Trump, traer de vuelta la manufactura a Estados Unidos, ya que eliminan la seguridad que las empresas requieren para invertir en cambios de abastecimiento.
Hasta el momento, la Casa Blanca no ha respondido a la solicitud de comentarios sobre esta situación crítica que afecta a una parte fundamental de la economía estadounidense.
