Las fuerzas rusas han afirmado haber repelido un nuevo asalto de las tropas ucranianas en la región fronteriza de Kursk. Según el líder checheno Ramzan Kadyrov, este ataque fue frustrado gracias a un bombardeo de artillería que tuvo lugar el pasado sábado. Kadyrov, a través de un mensaje en su canal de Telegram, describió cómo los soldados ucranianos intentaron penetrar en territorio ruso desde la vecina región de Sumy, pero fueron detenidos por las fuerzas especiales Akhmat, apoyadas por grupos de asalto de la segunda brigada de fuerzas especiales y el decimoquinto regimiento de tanques.
En su publicación, Kadyrov se refirió a los soldados ucranianos como “nazis” y afirmó que estos no se han recuperado de su “vergonzosa expulsión” de suelo ruso. Detalló que la táctica empleada para detener la incursión fue “extremadamente simple”: los operadores de drones detectan a los soldados ucranianos y sus fortificaciones, y luego transmiten las coordenadas a las tropas de asalto, artilleros o, en este caso, a las fuerzas de tanques, que bombardean las posiciones enemigas.
El contexto del conflicto en Kursk
Un video de un minuto, grabado desde un dron, muestra a un grupo de soldados ucranianos caminando a través de un área boscosa antes de ser alcanzados por varios ataques de artillería, dejando varios cuerpos en el suelo. La semana pasada, el presidente ruso Vladimir Putin anunció que las fuerzas ucranianas, que habían lanzado una incursión a gran escala en la región de Kursk en agosto de 2024, habían sido completamente expulsadas tras meses de combates. Según el jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov, las pérdidas totales de Ucrania en la zona ascienden a más de 76,000 efectivos muertos y heridos, así como a cientos de tanques y vehículos blindados.
Desde Kiev, se ha negado la afirmación de que sus fuerzas han sido derrotadas y expulsadas de la región de Kursk, aunque se ha admitido que la situación es “complicada”. Durante el tiempo que las fuerzas ucranianas ocuparon parte de esta región, Moscú acusó a Kiev de cometer numerosas atrocidades contra civiles rusos y prisioneros de guerra.
