Los Bloqueos de LaLiga: Un Impacto en la Libertad de Internet
Este fin de semana, servicios esenciales de internet como la red social X, la pasarela de pago Redsys y la plataforma de videojuegos Steam experimentaron cortes significativos. La causa de estos problemas no fue un fallo en los servidores o en las conexiones, sino el bloqueo sistemático de páginas web ordenado por LaLiga como medida para combatir la piratería en el fútbol. Desde febrero, cientos de miles de sitios web han sido afectados, con repercusiones que no solo impactan a las plataformas deportivas, sino también a medios de comunicación, aplicaciones y negocios de diverso tipo, limitando así derechos fundamentales como la libertad de información y de expresión, según afirman expertos en derechos digitales.
El gobierno español, a través del Ministerio para la Transformación Digital, ha optado por no intervenir, manifestando su respeto por las decisiones judiciales que permiten estos bloqueos. Durante los últimos meses, la comunidad ha manifestado su creciente preocupación en las redes sociales, donde la sensibilización sobre el tema ha aumentado. Ingenieros y propietarios de pequeños negocios han comenzado a relacionar los problemas de acceso a sus plataformas con estas medidas judiciales, lo que ha generado un clima de incertidumbre y quejas continuas. Se estima que alrededor de 3,5 millones de páginas podrían verse potencialmente afectadas por estos bloqueos, afectando incluso a entidades como clubes deportivos y entidades locales.
LaLiga, respaldada por una sentencia de un juzgado mercantil de Barcelona, defiende su derecho a protegerse contra la piratería. Sin embargo, críticos como Ofelia Tejerina, abogada y presidenta de la Asociación de Internautas, advierten que la forma en que se llevan a cabo estos bloqueos es problemática. Al igual que un propietario que cierra un edificio completo porque uno de sus inquilinos comete un delito, el bloqueo indiscriminado de IPs afecta a un amplio espectro de usuarios y negocios legítimos. Este enfoque ha llevado a varias empresas de servicios de internet a buscar soluciones para evitar ser víctimas de estas decisiones, aunque el impacto sigue siendo significativo.
