
Un grupo de fósiles de elasmosaurs, algunos de los más reconocidos en América del Norte, ha sido formalmente identificado como perteneciente a un nuevo género de este tipo de reptiles marinos, que se caracteriza por sus rasgos inusuales. El Traskasaura sandrae, como ha sido denominado oficialmente en un estudio reciente publicado en el Journal of Systematic Paleontology, presenta características que lo hacen único en comparación con otros elasmosaurs previamente conocidos.
Este reptil, que medía aproximadamente 12 metros de longitud y poseía dientes robustos y afilados, estaba bien adaptado para la caza. Su morfología sugiere que el Traskasaura podría haber sido uno de los primeros plesiosaurios en desarrollar una técnica de caza desde arriba, una adaptación interesante que le habría permitido atacar a su presa de manera efectiva.
Los fósiles de aproximadamente 85 millones de años no son nuevos para la ciencia; de hecho, el primer fósil conocido de Traskasaura fue descubierto en 1988 en las rocas del Cretácico tardío a lo largo del río Puntledge, en la isla de Vancouver. Desde entonces, se han recuperado más fósiles, incluyendo un húmero aislado y un esqueleto juvenil bien conservado. En total, el estudio detalla tres individuos que forman parte de esta colección, todos procedentes de la Formación Haslam de la isla de Vancouver.
Reconocimiento y estudio del Traskasaura
El Traskasaura fue descrito por primera vez en 2002, y recientemente ganó notoriedad cuando fue adoptado por la provincia de Columbia Británica como su fósil oficial. Este reconocimiento fue el resultado de un esfuerzo de cinco años por parte de entusiastas de la paleontología y de una votación pública en 2018, donde el elasmósaur obtuvo el 48% de los votos.
El profesor F. Robin O’Keefe, autor principal del estudio y experto en reptiles marinos de la era de los dinosaurios, señaló que, a pesar de que los fósiles de plesiosaurios se conocían desde hace décadas en British Columbia, la identidad del animal que los dejó había permanecido en el misterio. Su investigación concluye que el Traskasaura representa un nuevo género y especie, lo que resuelve esta antigua cuestión.
El profesor O’Keefe destacó la singularidad del Traskasaura, que presenta una mezcla extraña de rasgos primitivos y derivados. En particular, la estructura del hombro es inusual incluso entre los plesiosaurios. Además, se ha identificado que el Traskasaura poseía al menos 36 vértebras cervicales, lo que sugiere que su cuello podría haber tenido más de 50 huesos.
Respecto a su comportamiento, se cree que el Traskasaura utilizaba sus habilidades para nadar en dirección descendente para cazar. Su presa principal probablemente consistía en amonites, que eran abundantes en la región y que el Traskasaura podría haber aplastado con sus dientes robustos.
La investigación en torno al Traskasaura no solo aporta un nuevo conocimiento sobre la fauna marina de la era de los dinosaurios, sino que también destaca la importancia de la colaboración internacional en la paleontología, con investigadores de Canadá, Chile y Estados Unidos trabajando juntos para desentrañar los secretos de este fascinante reptil marino.