
En un contexto económico marcado por la incertidumbre global, la compañía automotriz Ford Motor ha presentado un notable aumento en sus ventas, reportando un incremento del 16.3% en comparación con el año anterior durante el mes de mayo. Este crecimiento se produce en medio de un programa de precios para empleados que ha sido implementado por la empresa, todo ello mientras se enfrentan a los efectos de los aranceles impuestos por la administración estadounidense.
Incremento en las ventas de vehículos tradicionales
Las cifras de ventas de Ford han sido impulsadas principalmente por un aumento del 17.2% en la venta de vehículos con motores de combustión interna tradicionales. Asimismo, los modelos híbridos han experimentado un notable crecimiento, con un incremento cercano al 29%. Este aumento contrasta con la caída del 25% en las ventas de vehículos eléctricos, incluida la popular camioneta eléctrica F-150, en comparación con mayo de 2024.
Ford ha mantenido su programa de precios para empleados, que ha sido clave en el impulso de sus ventas durante los últimos meses. Este programa se extenderá hasta el fin de semana del Cuatro de Julio, lo que podría seguir beneficiando sus cifras de ventas en el corto plazo.
La compañía ha tenido que ajustar los precios de algunos de sus vehículos, particularmente aquellos importados de México, después de la entrada en vigor de los aranceles del 25% sobre los vehículos importados, implementados por el presidente Donald Trump. Un portavoz de Ford ha indicado que estos aumentos de precios son el resultado de ajustes estacionales y del impacto de los aranceles.
Este panorama refleja no solo el desempeño de Ford en el mercado, sino también las complejidades y desafíos que enfrentan las empresas estadounidenses en un entorno global cada vez más interconectado. A medida que continúan las tensiones económicas y políticas, es fundamental observar cómo las empresas se adaptan a estas realidades, buscando equilibrar la competitividad con las realidades del comercio internacional.