Descubrimiento del naufragio del Western Reserve en los Grandes Lagos
El pasado mes de julio, exploradores de la Sociedad Histórica de Naufragios de los Grandes Lagos anunciaron el hallazgo del Western Reserve, un barco de carga de acero que se hundió hace 132 años en las aguas del Lago Superior, entre Michigan y Canadá. Este descubrimiento se realizó durante el Festival de los Barcos Fantasma, celebrado en Manitowoc, Wisconsin, y se considera uno de los hallazgos más significativos de la sociedad. El Western Reserve, destacado por su diseño avanzado y su gran tamaño, fue apodado “el galgo de los interiores” por su velocidad y tecnología innovadora en la época.
El 30 de agosto de 1892, el Western Reserve, que en ese momento navegaba sin carga, se vio atrapado en una tormenta en Whitefish Bay. El barco, construido para ser uno de los más seguros en el agua, se rompió en dos debido a la violencia del temporal, resultando en la pérdida de veintisiete vidas, incluyendo la de la familia del propietario, Peter Minch. La única persona que sobrevivió fue Harry W. Stewart, quien logró nadar hasta la costa tras volcar su bote salvavidas. Durante más de un siglo, el naufragio permaneció oculto bajo las aguas del lago.
La búsqueda del Western Reserve fue liderada por Darryl y Dan Ertel, quienes dedicaron más de dos años a localizar el barco. Utilizando un sonar de barrido lateral, lograron identificar la silueta del barco a unos sesenta millas al noroeste de Whitefish Point, a una profundidad de 600 pies. Al aumentar la resolución del sonar, descubrieron que el barco se encontraba partido en dos, lo que confirmaba que se trataba del Western Reserve. Posteriormente, un dron submarino equipado con cámara de alta resolución proporcionó imágenes claras de un faro que coincidía con uno que había llegado a la costa canadiense tras el hundimiento. Este artefacto se convirtió en el único objeto recuperado del naufragio, marcando un hito en la historia de la navegación en los Grandes Lagos.
