El primer ministro indio, Narendra Modi, ha prometido justicia para las víctimas del reciente ataque terrorista en el sur de Cachemira, que dejó un saldo de 26 muertos y numerosos heridos. Durante un mitin en el estado de Bihar, Modi condenó el ataque y aseguró que se tomarán medidas firmes contra los responsables, afirmando que «la justicia será servida».
“Le digo al mundo entero, India identificará, rastreará y castigará a cada terrorista y a sus cómplices. Los perseguiremos hasta los confines de la Tierra”, declaró Modi, enfatizando que “se harán todos los esfuerzos para asegurar que se haga justicia”. Además, hizo un llamado a la unidad nacional ante la adversidad, subrayando que “la nación entera está firme en esta resolución” y que “el espíritu de India nunca será quebrantado por el terrorismo”.
Detalles del ataque y respuesta de India
Las declaraciones de Modi se produjeron pocos días después de un brutal ataque en la región de Cachemira administrada por India, que tuvo lugar en el Valle de Baisaran, un destino turístico conocido como ‘mini Suiza’. La mayoría de las víctimas eran turistas, incluyendo un visitante de Nepal. El grupo conocido como The Resistance Front, considerado un desprendimiento de la organización terrorista pakistaní Lashkar-e-Taiba, ha reclamado la responsabilidad del ataque.
En respuesta a este acto de violencia, Nueva Delhi ha anunciado una serie de acciones de represalia contra Pakistán, que incluyen la expulsión de diplomáticos, el cierre de la frontera terrestre y la suspensión del Tratado de Aguas del Indo “hasta que Pakistán renuncie de manera creíble e irrevocable a su apoyo al terrorismo transfronterizo”.
India ha acusado durante mucho tiempo a Pakistán de facilitar infiltraciones militantes a través de la Línea de Control, la frontera de facto que divide la región en disputa entre ambos países, que son potencias nucleares. Por su parte, Islamabad ha negado cualquier implicación en el ataque y ha convocado una reunión de emergencia del Comité Nacional de Seguridad para evaluar la situación y determinar su respuesta. Casi 24 horas después del ataque, Pakistán expresó sus «preocupaciones» por la «pérdida de vidas» en Cachemira. Diversos países, incluidos Rusia y Estados Unidos, han condenado el ataque.
