Rusia y China mantienen la cautela y han rehusado este lunes felicitar al presidente de USA electo por la prensa, Joe Biden, argumentando que prefieren aguardar a que concluyan los procedimientos abiertos para contrastar los resultados de los comicios del tres de noviembre.
El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Wang Wenbin, ha sorteado en conferencia de prensa una pregunta sobre los motivos por los cuales Beijing todavía no había felicitado a Biden, como sí han hecho otras autoridades mundiales: «Entendemos que el resultado de las elecciones presidenciales va a ser determinado de conformidad con las leyes y procedimientos de Estados Unidos».
«Responderemos conforme a la práctica internacional común», ha añadido Wang, quien ha aprovechado para proteger la necesidad de que Beijing y Washington resuelvan sus posibles diferencias sobre la base del «respeto mutuo», conforme declaraciones recogidas por medios oficiales.
Las dudas se extienden asimismo al Kremlin, cuyo portavoz, Dimitri Peskov, ha dicho que Moscú espera poder conversar con el futuro presidente de U.S.A. –para «normalizar relaciones»– mas sin dar por cierto todavía que va a ser Biden, proclamado presidente elegido el sábado desde las proyecciones sobre los resultados en diferentes estados.
«Consideramos que sería adecuado aguardar los resultados oficiales de las elecciones celebradas», ha señalado Peskov, que de esta manera ha justificado que el presidente ruso, Vladimir Putin, todavía no se haya pronunciado sobre el escenario político de USA.
El presente líder de Norteamérica, Donald Trump, ha anunciado una catarata de recursos judiciales para procurar impugnar unos resultados que tampoco reconoce, por comprender que hubo fraude en el voto por correo.