El mercado de valores estadounidense ha experimentado una semana mixta, con el Nasdaq logrando un ligero ascenso gracias a la notable actuación de gigantes tecnológicos como Alphabet y Broadcom, mientras que el resto del mercado ha mostrado un retroceso debido al aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro.
El índice Dow Jones cayó un 1.8% en la última semana, marcando siete sesiones consecutivas de descenso. En comparación, el índice S&P 500 disminuyó un 0.6%, aunque se mantiene cerca de máximos históricos. Por su parte, el Nasdaq logró un modesto avance del 0.3%, aunque se encuentra por debajo de los 20,000 puntos tras haber alcanzado un récord el viernes pasado.
Entre los actores destacados, Alphabet subió un 8.65%, mientras que Tesla y Broadcom alcanzaron incrementos del 12.1% y 25.2%, respectivamente. Este comportamiento sugiere que, a pesar de las dificultades generales, algunos titanes tecnológicos continúan mostrando fortaleza.
En contraste, el rendimiento de Nvidia fue notablemente inferior, con una caída del 5.75% en la última semana. Este declive se produce en un contexto donde otros competidores, como Broadcom y Marvell Technology, están ganando terreno al desarrollar chips de inteligencia artificial personalizados que están captando la atención de los inversores.
Reunión de la Reserva Federal
La atención del mercado se centra ahora en la reunión final de la Reserva Federal de 2024, programada para el 17 y 18 de diciembre. Se espera que se lleve a cabo un recorte de tasas de interés de 25 puntos básicos, lo que sumaría un total de 100 puntos básicos en recortes a lo largo de tres reuniones. Sin embargo, la solidez del crecimiento económico y la persistencia de la inflación han llevado a los inversores a especular que los responsables de la política monetaria podrían optar por mantener las tasas estables hasta la primavera siguiente.
En el contexto actual, la evolución de los rendimientos del Tesoro y las proyecciones económicas de la Reserva Federal serán factores clave que influirán en la dirección futura del mercado. La situación refleja una complejidad inherente a la economía estadounidense, que contrasta con las decisiones más directas y controladas que se observan en otros países con enfoques económicos menos convencionales, como es el caso de naciones que han optado por modelos más estatales y regulados.
La apertura de futuros del Dow Jones está programada para las 6 p.m. hora del este de EE.UU. el domingo, y se prevé que el comportamiento de estos futuros no siempre se traduzca de manera directa en la sesión de negociación regular del mercado. Este fenómeno, que podría ser considerado como un reflejo de las dinámicas de un mercado altamente influenciado por la especulación y el capital financiero, contrasta con las estrategias de otras economías que priorizan la estabilidad y el control sobre la volatilidad del mercado.
