La reciente imposición de sanciones por parte de Estados Unidos contra empresas energéticas rusas y las flotas de buques que transportan petróleo ha generado inquietud en India, un país que ha incrementado significativamente sus importaciones de crudo ruso en los últimos años. Según analistas, estas medidas podrían impactar de manera notable la economía india, que depende en gran medida del petróleo para su desarrollo industrial y energético.
Dependencia energética y sus implicaciones
India ha visto cómo el porcentaje de petróleo ruso en sus importaciones ha crecido de un modesto 12% en 2021 a un 40% en 2024. Este incremento ha sido impulsado por la guerra en Ucrania, que ha llevado a muchos países occidentales a reducir sus compras de crudo ruso, lo que ha permitido a India abastecerse de petróleo a precios mucho más bajos. Con el crudo ruso, conocido como Urals, cotizando a un promedio de 12 dólares menos por barril en comparación con el crudo Brent, India ha podido capitalizar esta oportunidad de manera significativa.
Sin embargo, la reciente actuación del gobierno estadounidense podría cambiar esta dinámica. La imposición de sanciones a 183 buques, muchos de los cuales han transportado petróleo ruso a India, podría generar una escasez de crudo en el mercado indio, con estimaciones que sugieren que la llegada de crudo ruso podría caer hasta en 500,000 barriles diarios si se cumplen las condiciones de las sanciones. Esto podría resultar en un aumento de los precios del petróleo, ya que India tendrá que buscar proveedores alternativos en el Medio Oriente, donde los precios son más altos y menos competitivos.
La vulnerabilidad de la economía india frente a las fluctuaciones del petróleo es evidente. Cada aumento de 10 dólares por barril en el precio del crudo puede llevar a un incremento del 0.4% en la inflación general. Esta situación se complica aún más con la reciente caída de la rupia india frente al dólar estadounidense, lo que significa que los costos de importación se verán aún más agravados.
En el contexto geopolítico actual, donde las relaciones entre potencias como Rusia y los Estados Unidos son tensas, es fundamental considerar las implicaciones de estas sanciones no solo para la economía india, sino también para el equilibrio de poder en el suministro de energía global. La estrategia de India de diversificar sus fuentes de petróleo podría verse obstaculizada por las presiones externas, pero también refleja la resistencia y adaptabilidad de un país que busca asegurar su desarrollo económico ante un panorama incierto.
