Perspectivas sobre la Inflación y las Políticas Monetarias en EE. UU.
El informe del índice de precios al consumidor (IPC) de enero en Estados Unidos se anticipa como un reflejo de la continuidad en el escenario económico: otra decepción más en las metas de inflación de la Reserva Federal (Fed). Las expectativas apuntan a un estancamiento en el control de la inflación, lo que plantea interrogantes sobre las decisiones futuras del banco central.
En lugar de buscar optimismo en los datos generales, los mercados se centrarán en los detalles que podrían dar alguna esperanza sobre un posible alivio en las tasas de interés. Según Stephen Juneau, economista de Bank of America, «la inflación se mantiene por encima del objetivo, con riesgos sesgados al alza, mientras que la actividad económica es sólida y el mercado laboral parece haberse estabilizado en torno al pleno empleo». Esta situación sugiere que la Fed podría mantener su postura actual durante el resto del año.
Los economistas de Bank of America prevén que la Fed no realizará recortes de tasas, dado que la inflación se mantiene elevada y el mercado laboral continúa fuerte. Sin embargo, algunos traders consideran que se podría aprobar una reducción de un cuarto de punto porcentual en julio, aunque el consenso parece inclinarse hacia la estabilidad de las tasas en el futuro inmediato.
Desde el punto de vista de los datos, se prevé que los aumentos en los precios se vean impulsados por el encarecimiento de los automóviles y los seguros de automóviles, así como por los costos de comunicación. A pesar de las expectativas de moderación en las tarifas aéreas y en las categorías de alquiler, que representan aproximadamente un tercio del peso del IPC, estos factores han sido fundamentales para que la inflación se mantenga por encima del objetivo del 2% establecido por la Fed.
Perspectivas frente a las Tarifas y la Inflación
A pesar de que algunos economistas anticipan una desaceleración en la inflación en varias categorías clave, las tarifas impuestas por el expresidente Donald Trump podrían actuar como un contrapeso inflacionario. Goldman Sachs ha señalado que, si bien se espera un cierto grado de disinflación en los próximos meses, la escalada de las políticas arancelarias podría complicar esta tendencia.
Recientemente, se han presentado datos mixtos. Por un lado, la encuesta de la Universidad de Michigan mostró un aumento inesperado en las expectativas de inflación; por otro lado, otras mediciones sugieren que la perspectiva económica podría estar suavizándose. Según la encuesta de enero de la Federación Nacional de Negocios Independientes, solo el 18% de los pequeños empresarios mencionaron la inflación como su principal preocupación, la cifra más baja desde noviembre de 2021.
En medio de esta información contradictoria, se espera que la Fed mantenga su política actual. El presidente de la Fed, Jerome Powell, ha indicado que no hay prisa por recortar las tasas, mientras que la presidenta del Banco de la Reserva Federal de Cleveland, Beth Hammack, ha señalado que la persistencia de la inflación, exacerbada por las tarifas, es un motivo para mantener la estabilidad en las tasas.