Puede parecer que comprar actualmente en plena era digital un elemento de escritura tan clásico como lo es una pluma sea una pérdida de tiempo y dinero, pero eso es porque no conoces lo que una marca como Montblanc, expertos en escrituras puede llegar a hacer con cada uno de estos elementos, convirtiéndolos en verdaderas piezas de coleccionista al alcance tan solo de los clientes más exclusivos. De hecho, la pluma más cara del mercado pertenece a esta marca e incluye desde varios tipos de oro hasta gemas de la talla del zafiro, esmeraldas, etc.
Al margen de su increíble estética y el valor que esta presente a través de los materiales que incluye su estructura, cabe destacar que cada una de las plumas Montblanc rinden homenaje a su manera a la literatura. Ya sea mediante los escritores que han hecho historia (a través de un diseño en el que se recuerde al mismo, se graven las iniciales de su nombre, etc.) O a través de un diseño adaptado a este utensilio en el que se emule alguna de las obras más populares y que han marcado historia. Un claro ejemplo de ello es uno de los últimos modelos que han lanzado al mercado: «La Meisterstück Le Petit Prince», que homenajea a uno de los libros más importantes de todos los tiempos.
Desde 1.900 se siguen creando plumas de la marca pertenecientes a todo tipo de líneas (Meisterstück, StarWalker…) Y ediciones (Grandes personalidades, musas, escritores, Heritage Collection, Montblanc Sand…) las cuáles tienen una misión: seguir contribuyendo a la causa y mantener viva una de las tradiciones más antiguas y con más clase que existen. Reservando las plumas Montblanc para las ocasiones más especiales: ya sean las firmas de grandes contratos multimillonarios, un escrito emotivo, herencias, etc.
Su belleza (gracias a su gran nivel de detalle) y su valor son su seña de identidad, demostrando que la escritura clásica aún está presente en la sociedad y esta es valorada como merece por marcas como esta, así como los clientes habituales que quieran comprar una pluma Montblanc.
Una compra que, sin embargo, no está libre de peligros. Y es que al tratarse de un producto tan valioso y codiciado, son muchas las imitaciones que circulan tanto en las tiendas físicas como, sobre todo, en el mundo online. Muchas de ellas se pueden identificar perfectamente o anuncian por sí solas dicha imitación, pero otras buscan engañar al público. Por eso debes de tener cuidado a la hora de comprar plumas Montblanc online, y hacerlo tan solo en tiendas que te ofrezcan ciertas garantías al respecto: y no hablamos tan solo de una hipotética devolución del dinero, garantía de reparación o reemplazo ante cualquier desperfecto, etc. Sino garantías de que realmente estás comprando plumas oficiales de la marca.
Cómo saber si son plumas Montblanc originales
Existen formas de que puedas determinar la autenticidad de estos elementos de escritura por ti mismo sometiéndolos a examen, aunque para ello deberás de conocer el tipo de identificativos que incorporan las plumas Montblanc originales, a saber:
El número de serie: Este es el más importante de todos, y deberás buscarlo en la parte superior de la pluma, muy cerca del anillo de esta. Ahí deberán de aparecer dos dígitos grabados en una tipografía cuadrada encargados de otorgar la autenticidad que tanto buscas en uno de estos útiles de escritura.
El emblema: La estrella es la insignia que marca todas las plumas de la marca, y esta debe de estar perfectamente ubicada en el centro de la tapa, por lo que cualquier desplazamiento extraño, por mínimo que sea, debe de ponerte alerta acerca de su autenticidad.
También es bastante habitual que muchas de las imitaciones incluyan el término «Made in Germany» incluido en algún lugar de su estructura (comúnmente grabado), y aunque ciertamente se tratan de plumas originarias de Alemania, la realidad es que las originales no incluyen dicha seña. Tan solo algunos modelos anteriores a la década de los 90, pero son muy antiguos y prácticamente ya no se comercializan. Eso sí, justo al lado del número de serie las originales sí que incluyen la palabra «Germany» en solitario, por lo que tenlo en cuenta en dicha revisión.