En España, el jamón suele ser una pieza clave y el centro por excelencia de muchas mesas en los hogares. Son alimentos que aportan distinción y enaltecen los sabores que se degustan en cada bocado.
Es por eso que muchos fabricantes y productores tienen presente la importancia de este alimento y ofrecen solo lo mejor en ricos y suculentos jamones, que pueden combinarse con cualquier complemento al gusto y sazón. Tal es el caso de los jamones y embutidos, que con su proporción, nutrientes y sabor harán que todos desean tenerlo en un rico plato listo para comer durante estas navidades.
El rico sabor del jamón
La inigualable carne de cerdo que ofrecen los mejores productores se crían en un ambiente ideal donde el fruto de sus cientos de encinas y el ecosistema en el que se asientan lo convierten en un producto fundamental para la gastronomía. El jamón se obtiene de las patas traseras del cerdo.
Los fabricantes y productores de jamones tienen especial cuidado por el detalle. Antes de salir al mercado, se evalúa el proceso del producto para asegurarse de tener un sano consumo. Y es que las organizaciones que comercian alimentos necesitan de grandes planificaciones para procesar cada producto como lo es en este caso el jamón y los embutidos.
Tipos de jamón
El jamón a lo largo de la historia ha sido partícipe junto a otras deliciosas comidas en festividades importantes. De acuerdo con su sabor y presentación, es una de las piezas más importantes para cualquier banquete. Además, esta gran variedad de presentaciones se basan en dos tipos jamón
- Jamón ibérico: El jamón ibérico es todo un manjar imprescindible en la dieta de muchos amantes del jamón, pues su intenso aroma, sabor y su textura fibrosa y aceitosa es única en su clase. Es el fruto de cerdos machos y hembras ibéricos. Esta raza de cerdo se caracteriza por sus patas largas y fino esqueleto y ofrecen un sabor característico gracias a la alimentación de este tipo de cerdo. A nivel visual, este jamón se distingue por la pezuña negra del jamón.
- Jamón serrano: El jamón serrano se caracteriza por su sabor tenue y un poco salado. Además, su aroma es muy agradable y más suave en comparación con el jamón ibérico. Este cerdo tiene una apariencia clara, pues su capa de piel es blanca e incluso su pezuña tiene algunos tonos blancos con bases marrones. Su grasa es perfecta para su cocción y tiene un aroma y sabor que enaltece a muchos.
La bodega para los mejores jamones
Las bodegas comunes son parte importante en el proceso de las piezas del jamón. Naturalmente se cuelgan de forma vertical por cierto periodo, dependiendo del tipo de pieza que se desee obtener. Y es que este proceso puede hacer perder su peso inicial hasta en una tercera o cuarta parte del peso original.
Este proceso requiere de un seguimiento meticuloso en donde cada etapa es significativa para el desarrollo final de este manjar.
Cada procedimiento según la característica del jamón debe pasar por un seguimiento de la tradición milenaria para así conseguir ese exquisito manjar que solo los maestros jamoneros pueden realizar.
Diferencias entre el jamón y la paletilla
- El jamón y la paletilla son exquisitos manjares. Sin embargo, varían en peso, sabor, tiempo de curación y precio. La diferencia más notable es que el jamón se obtiene de la pata trasera del cerdo y la paletilla por sus patas delanteras.
- Además, las paletillas tienen un tiempo de curación mucho más corto que el jamón. Su peso es mucho más ligero.
- El jamón proporciona lonchas más grandes, al contrario que las paletillas.
Solo los maestros jamoneros saben que la fabricación y producción del jamón debe representar la tradición y pasión que tiene muy bien ganado este exquisito producto. En la actualidad el jamón se fabrica con calidad y se procura ofrecer lo mejor en alimentos para el cliente, desde sus piezas enteras hasta los embutidos, siendo ya parte importante del arte culinario y la gastronomía mundial.