Con la última legislación que regulaba el juego y, también, por extensión, el juego online, se ha buscado tener bajo control un sector que, aunque parezca ocio, mueve millones de euros cada año y no para de crecer.
Para que en España se pueda ofrecer este tipo de juego online, es necesario cumplir con unos requisitos que garantizan la seguridad del jugador y transacciones en la red.
Desde el propio Ministerio de Hacienda se dan una serie de recomendaciones como el que el participante verifique si la web forma parte de quienes poseen el obligatorio título habilitante, algo verificable en la Dirección General de Ordenación del Juego, quien actualiza constantemente el listado y, también, verificar que el dominio acaba en .es para garantizar que están cumpliendo la exigencia de dicha licencia y que se atienen a la legislación española.
Aparte de esto, aglutinar la oferta en una web, como ocurre en casinosplayer.com es interesante para saber cuáles son los más populares, los bonos que ofrecen por depósito, etc.
Pero, ¿cuántas están registradas de forma legal?
Aproximadamente, en el momento de hacer este artículo, hay 80 sites que cuentan con los requisitos legales para ofrecer en España juegos online con licencia.
Entre ellos, están los más conocidos como 888Spain, que tiene un conglomerado con apuestas de distinto tipo desde póker hasta deportivas, Betway o Betfred, otros grandes conocidos del sector, pero no son los únicos.
Cada vez son más las marcas que aterrizan en España para ofrecer sus servicios de apuestas online, un sector que cada año mueve algo más del 10% de los más de 5000 millones de euros del sector.
¿Cómo han llegado a ser tan conocidas? En muchos casos gracias a estrategias muy cercanas al deporte, patrocinando equipos de fútbol que juegan competiciones no solo nacionales sino internacionales. Eso ha hecho que haya que dar un paso al frente para también la educación en el juego responsable, algo que empieza a calar en la sociedad para aportar su granito de arena en la legalización de un sector que garantice a quienes se acerquen a él las garantías necesarias.