Si las emociones son el color de la vida, ¿por qué complican con frecuencia? Esa es una de las primeras preguntas que se planteó Axel Capriles M., psicoanalista y ensayista. En su visión, comparte con Martha Nussbaum el que las emociones están asociadas a objetivos. Pero, ¿qué tipo de objetivos?
El significado de las emociones y pasiones lo desgrana Capriles en su último trabajo, un ensayo que lleva por título Erotismo, vanidad, codicia y poder. Las pasiones en la vida contemporánea, publicado por Editorial Turner.
En pleno siglo XXI se puede decir que la sociedad vive una era de emociones explosivas, más que visible en los fanatismos, linchamientos y excesos en las redes.
“El sentimiento de indignación y humillación al leer comentarios, las discusiones a veces apasionadas sobre el sexo y la definición de género son solo algunos ejemplos del tiempo en el que vivimos. Todo ello lleva a la necesidad de encontrarse y entenderse en un contexto emocional, tanto a nivel personal como en el entorno en el que se interactúa. A diferencia de otras épocas, vivimos un siglo apasionado, lejos de la fe de la Edad Media o la razón de la Ilustración” comenta Capriles.
A lo largo de las páginas de su obra, se desgranan las bases para comprender el lenguaje propio de las emociones, de las pasiones que llevan a seguir a personas tóxicos, a enamorarse de la persona equivocada, a vivir con fervor las redes. Sus líneas llevan a mirar cara a cara la personalidad propia, el proceso en el que se define el desarrollo personal.
“No todo el mundo se puede aproximar a este ensayo de la misma forma. Mientras que los psicólogos creen que traduce la complejidad de su disciplina a cualquiera sin su formación específica, son muchos los que creen que su lectura es intensa en términos como el psicoanálisis. Eso es lo novedoso. Un libro en el que las emociones son racionales pero su objetivo y sus metas no están referidas al mundo exterior y a las otras personas, sino que son expresión de nuestros propios procesos psíquicos. Tenemos que aprender a leer las emociones en términos totalmente distintos a los que hemos hecho hasta ahora para ser capaces de comprenderlas” explica.
Para sacar partido al libro, en sí mismo, es necesario contextualizar las emociones desde la propia historia para comprender que el siglo XXI es, a todas luces, menos racional de lo que se podría esperar con toda la información al alcance de la sociedad. El fanatismo, la polarización, un sentimiento de resentimiento social…un camino largo hasta llegar también a las emociones mismas y a la vanidad, narcisismo, erotismo y poder.
“El narcisismo, como psicología colectiva, muestra los flecos de una cultura que, fundada en la superficialidad, husmea inconscientemente signos para su transformación” desgrana Capriles, quien se lleva a preguntar también en el propio ensayo el por qué la sociedad es atraída por líderes tóxicos en todos los niveles.
Un espejo directo a las emociones que no dejará indiferente a quien se enfrente a este trabajo. Cinco capítulos en los que el análisis crítico de las pasiones abrirán todo un mundo de autocomprensión