El Inter de Milán ha emergido como el nuevo rey del fútbol italiano, buscando establecer una hegemonía que se había visto interrumpida por la Juventus y, en menor medida, por el Milan y el Nápoles. Bajo la dirección de Simone Inzaghi, el club ‘nerazzurro’ ha logrado consolidar un proyecto sólido que combina la experiencia de jugadores como Lautaro Martínez y Nicolò Barella con un estilo de juego que se ha vuelto casi automático gracias a años de trabajo conjunto. El año 2024 ha sido especialmente significativo, ya que el Inter conquistó el campeonato con una notable facilidad, lo que ha generado expectativas altas para la próxima temporada. Sin embargo, la competencia se ha intensificado, con un Nápoles renovado bajo la dirección de Antonio Conte y una Atalanta que ha mostrado un rendimiento excepcional.
La dupla formada por Lautaro y Marcus Thuram ha sido clave en el resurgimiento del Inter. La marcha de Romelu Lukaku dejó un vacío, pero el fichaje de Thuram ha equilibrado el ataque del equipo. La solidez defensiva del Inter, combinada con la capacidad goleadora de sus delanteros, ha resultado en un equipo que ha dominado la Serie A, superando a rivales que no lograron estar a la altura. Con un estilo de juego claramente definido, el Inter se ha posicionado como el favorito para repetir el éxito, aunque con la presión de un Nápoles que ha recuperado su competitividad y una Atalanta que ha sorprendido a todos con su regularidad.
En el otro lado de la moneda, la Atalanta ha tenido un año memorable al alzarse con la Europa League y liderar la Serie A. El entrenador Gian Piero Gasperini ha sabido sacar lo mejor de su plantilla, incluyendo a jugadores como Ademola Lookman y Charles De Ketelaere, quienes han destacado en el ataque. La consistencia del equipo, que ha trabajado bajo una misma filosofía durante años, ha sido fundamental para su éxito. Por otro lado, el Sassuolo ha sufrido un duro golpe al descender, marcando el fin de su etapa en la élite del fútbol italiano, mientras que Cesc Fàbregas ha comenzado su carrera como entrenador en el Como, con el objetivo de llevar al equipo a la Serie A. En resumen, el fútbol italiano se encuentra en un momento de transformación con varios clubes buscando reclamar su lugar en la cima.