Un equipo de investigación interdepartamental de la Facultad de Medicina LKS de la Universidad de Hong Kong (HKUMed) ha llevado a cabo el primer estudio de cohorte analítico en el mundo sobre la asociación entre el uso de clozapina, un antipsicótico de alta eficacia, y la incidencia de cáncer sanguíneo. Los resultados obtenidos indican que el riesgo de desarrollar cáncer sanguíneo asociado a la clozapina es muy bajo, con un incremento promedio de menos de seis casos por cada 10,000 personas que la utilizan durante un año. Por lo tanto, la relevancia clínica de este riesgo es, en términos plausibles, baja. Este hallazgo desafía las conclusiones de estudios previos realizados en Occidente que habían sugerido un aumento significativo del riesgo, lo que podría llevar a las autoridades sanitarias a reconsiderar la necesidad de restringir aún más el uso de la clozapina y a facilitar el tratamiento temprano y efectivo de enfermedades mentales.
Contexto y metodología del estudio
La clozapina es actualmente el único antipsicótico aprobado por la FDA de Estados Unidos para el tratamiento de la esquizofrenia resistente al tratamiento. Es ampliamente reconocida por su alta eficacia en la reducción de síntomas, tasas de recaída y mortalidad por todas las causas en pacientes con esquizofrenia. Recientes estudios realizados en Finlandia y Estados Unidos habían sugerido que la clozapina podría estar asociada con un aumento significativo del riesgo de cáncer sanguíneo. Sin embargo, debido a restricciones de datos y diseño de estudio, no se había podido estimar el número adicional de casos de cáncer sanguíneo asociados con la exposición previa a la clozapina, lo que dejaba indefinida la significación clínica de este riesgo.
El equipo de investigación utilizó registros electrónicos de salud de toda la región de Hong Kong, analizando más de 400,000 expedientes de pacientes para construir una cohorte retrospectiva de aproximadamente 10,000 pacientes diagnosticados con esquizofrenia entre 2001 y 2022, quienes fueron seguidos durante una mediana de siete años desde el inicio de su tratamiento. Los hallazgos más relevantes del estudio incluyen:
- Riesgo absoluto de cáncer sanguíneo muy raro: En la cohorte de 10,000 pacientes, solo 39 desarrollaron cáncer sanguíneo, lo que representa menos de seis casos por cada 10,000 pacientes tratados con clozapina durante un año, tras ajustes estadísticos.
- Consistencia con estudios occidentales: La tasa de incidencia ponderada de cáncer sanguíneo en usuarios de clozapina frente a controles se estimó en 2.22, lo que sugiere una ligera asociación, consistente con los hallazgos de estudios de caso-control previos en Finlandia y Estados Unidos.
- Sin riesgo para otros tipos de cáncer: No se observó asociación con otros tipos de cáncer en el estudio.
El profesor Francisco Lai Tsz-tsun, líder del proyecto y profesor asistente en los departamentos de Farmacología y Farmacia y de Medicina Familiar y Atención Primaria de HKUMed, destacó la importancia de estos resultados: «Este estudio proporciona evidencia confiable para pacientes y profesionales de la salud que respalda la seguridad del medicamento. Las medidas de monitoreo sanguíneo actuales son muy completas y los pacientes no deberían preocuparse excesivamente por el riesgo de cáncer sanguíneo asociado a la clozapina, dada la rareza de su ocurrencia».
El equipo de investigación está actualmente reevaluando una amplia gama de efectos adversos potenciales de otros medicamentos psicotrópicos, especialmente en lo que respecta a riesgos oncológicos y su seguridad y eficacia a largo plazo. «A través de nuestros esfuerzos interdisciplinarios, esperamos informar mejor las decisiones clínicas cotidianas y hacer que el uso de medicamentos en pacientes con enfermedades mentales sea mucho más seguro y efectivo», agregó el profesor Lai.
