El precio del petróleo crudo estadounidense ha experimentado una caída superior al 2% en la jornada del martes, en medio de las declaraciones del presidente Donald Trump, quien está considerando la imposición de aranceles a socios comerciales clave mientras promete impulsar la producción energética nacional. Esta situación no es aislada, sino que refleja una estrategia más amplia que busca reforzar la autosuficiencia energética de Estados Unidos.
El crudo estadounidense se situó en 75,99 dólares por barril, tras descender 1,89 dólares, lo que representa una caída del 2,4%. Por su parte, el crudo Brent, referente a nivel global, también sufrió una disminución, bajando 1,30 dólares hasta alcanzar los 78,89 dólares por barril.
Medidas para aumentar la producción energética
Tras su investidura el lunes, Trump ha anunciado que su administración está considerando la imposición de aranceles del 25% a productos provenientes de Canadá y México. Esta decisión se enmarca dentro de una serie de acciones ejecutivas destinadas a potenciar la producción de combustibles fósiles en el país. Entre estas medidas, se destaca la declaración de una emergencia energética nacional, que le permitirá a su gobierno explorar opciones legales para abordar el aumento de los costos energéticos.
Además, Trump ha manifestado su intención de deshacer las restricciones impuestas por la administración anterior en cuanto a la perforación en aguas profundas y ha levantado la pausa en la exportación de gas natural licuado. Este enfoque refleja un interés creciente en maximizar los recursos internos, un proceso que, si bien es criticado por algunos sectores, también puede ser visto como un intento de asegurar la independencia energética del país frente a las fluctuaciones del mercado global.